1

349 25 1
                                    

— Mierda... ¿Cómo puede estar pasandome esto?

Tengen se sentía bastante desafortunado, a pesar de tenerlo todo.

Se sentía cansado y abrumado. Las dudas invadían su cabeza, todo lo hacía pensar y dudar de su capacidad. ¿Cómo era posible? ¿Cómo podía haber un mes de tanta desgracia?

Tengen era uno de los artistas más reconocidos de todo Japón y en unos meses tendría la inauguración de su nueva galería de arte y había prometido una nueva pintura. Y con un nuevo estilo. ¡Ahora se arrepentía de lo que dijo!

Usualmente solía demorar al plasmar su creatividad en cuadros, una semana, o dos, dependiendo. Sin embargo, esta pintura lo estaba estresando. Había pintado de todo, realistas, hiperrealistas, abstracto, surrealista, etc, etc. Lo que sea que se le venía a la mente. Pero ahora, no había nada ahí, la tenía vacía.

Su miedo más grande se había hecho realidad.

Un bloqueo artístico.

Sus pensamientos se lo estaban comiendo vivo, hasta que tocaron la puerta de su departamento.

— Ya voy.

Se levantó con desánimo y se dirigió a la  puerta. Era su gran amigo, Kyojuro.

Kyojuro era un hombre alto, con buen porte y cabello rubio con puntas rojas. Tenía una mirada bastante expresiva y su sonrisa era como la luz del sol. Kyojuro era maestro en una secundaria, y era bastante querido por sus estudiantes.

— ¡Tengen! ¡Estas vivo! —lo abrazó y se separó rápidamente— Lamento venir sin avisar pero nadie sabía de ti. ¿Perdiste el teléfono?
— ¡Kyojuro! Ah, lo siento... Es que, bueno, no. Lamento no responder, estuve ocupado —pasó su mano por su cabello y miró de vuelta— Gracias por venir realmente necesito compañía, pasa.
— Ya veo... —asintió e ingreso a la casa de su amigo— Venía a proponerte algo.
— ¿Uh? Toma asiento —le señaló el sofá y pidió que se sentará— ¿Qué me propondrás?
— Bueno, teníamos una profesora de Arte, sin embargo, ha pedido descanso médico y necesitamos un reemplazo... ¡No se me ocurrió mejor persona que tú!
— Ah... —pensó un rato, realmente nunca había trabajado de docente, pero no le vendría mal probar algo nuevo— Bueno, esta bien.
— ¡Genial! ¿Podrás empezar mañana?
— ¿MAÑANA?
— Si, mañana. ¡Vamos, te será de ayuda!

Mi Obra de Arte [UzuZen] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora