Cinco

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Un delicioso aroma se adueñó de sus fosas nasales, haciendo que se terminará de despertar.

El azabache se incorporó y miró la habitación un poco confundido, por estar en el cuarto de huéspedes, el recuerdo de anoche invadió su mente.

Sakura y Takeshi se habían quedado a dormí anoche en su casa.

Se levantó de la cama y se metió al baño para lavarse la cara y sepillarse los dientes.

Una vez que estuvo bien despierto, salió de la habitación y camino hacia a donde porvenir aquel aroma tan esquisito.

Encontrándose con cierta pelirosa tarareando una melodía, mientras cocinaba algo, ver aquello hizo que una sensación calida se instalará en su pecho.

- buenos días Sasuke- saludo Takeshi agarrandolo por sorpresa.

- buenos días- contesto mirando al pequeño quien ya estaba sentado en la mesa, esperando a que su hermana le sirviera el desayuno.

Sasuke se avergonzó, pues no había notado la presencia del pequeño.

De seguro Takeshi debió de ver cómo se le había quedado viendo a su hermana con una expresión de un idiota enamorado.

- buenos días Sasuke- la dulce y angelical voz de Sakura lo obligó a regresar la mirada hacia la cocina.

- buenos días Sakura- regreso el saludo.

- espero no te importe que haya echo el desayuno para todos- comento la chica llevando algunos platos a la mesa.

- no me molesta.

- bien, espero que tengan hambre también te prepare el desayuno.

Sasuke no pudo evitar que un sonrojo se adueñara de sus mejillas, pareciera como si ambos estuvieran casados. El pelinegro se sentó en la mesa con ellos, el ambiente era feliz y cálido haciendo que el departamento del azabache, no fueran tan silencio con las bromas de Takeshi y la risa de la pelirosa.

No le molestaba, al contraria hacia que ese vacío que sería casi todos los días, se llenarán con pequeños momentos que ambos le daban.

- hermana no se te olvide que hoy buscaremos el regalo de Emma- le recordó el pequeño, llevándose un bocado de los panqueques que preparo su hermana.

- ¿Irán al cumpleaños de Emma?- pregunto el azabache intrigado por saber.

- si, Emma invito a Takeshi a su cumple, espero no te noleste- contesto Sakura un poco tímida, con la mirada clavada en el plató- se que no somos de una familia adinerada y por eso, espero que nuestra presencia no les cause algún problema.

El pelinegro frunció el ceño con el contrario de la pelirosa, por supuesto que no habría ningún problema, el estatus social era algo en la que Sasuke no le importaba en lo absoluto ni a él ni a su familia.

- no sería ningun problema, me alegra saber que irán. Emma estara feliz de verlos a ambos- contesto Sasuke, recibiendo un mirada llena de ternura por parte de Sakura.

Sasuke se perdió en aquella dulce y tierna mirada, olvidándose por un segundo de la presencia de Takeshi, quien los veía a ambos con una sonrisa.

Cuando ambos se dieron cuando de que cierto rubio los miraba, decidieron apartará la mirada avergonzados.

- gracias por permitirnos a Takeshi y a mi quedarnos a dormir en tu casa- dijo la pelirosa, al momento que recogían los platos sucios y los limpiaba, con ayuda de Sasuke.

- no es nada, ni iba a permitir que se fueran tan tarde- respondió.

Unos minutos después, Sasuke veía como la pelirosa y si travieso hermano se iban de su departamento, no sin antes despedirse.

Curando tus heridas (Sasuke X Sakura)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora