Yapo fuyu.

Perdón Hina.

—Mikey por la chucha.—Lo tomó de los hombros y besó sus mejillas.—No podi andar llorando por ese feo culiao, ¿tenía pico de oro acaso?

—... —Puchereó, comenzando a llorar más.

—La cagué.

La Jose estaba con el Mikey. La Jose solía llamarlo para que el niño no se sintiera solito y así apapacharlo con ella, pues eran mejores mejores amiguitos muy lindos.

—¿No hay pensao en decirle a la Hina lo que pasa?

—Me va a odiar.. pero si.—Frotó sus ojos.—No e justo que una mina tan linda como la Hina tenga un pololo y amigo tan penca..

—Mira amigo.—Tomó sus mejillas.—Si queri le hablamo altiro. Ya volvió del sur, así que.. Ta en casita.

—¿Segura?

—Segura.. Yo si la Yuzu me engañara, me gustaría que me dijeran las cosas y se que la Hina no lo va a tomar tan mal de tu parte, espero..—Mordió su labio, algo nerviosa.—Y si lo toma mal.. e entendible y lo sabi, ¿verdad?

—Si Jose. Se lo que puede pasar..

—¿La llamo ahora? e tempranito y puede estar desocupa.

El mikey asintió, mientras abrazaba sus piernas y sollozaba entre sí. Estaba nervioso, pues aunque le tenía envidia y celos a Hina por ser la pareja de Takemichi, sabía que no podía odiarla y sabía lo angel que era ella con el y con todos, así que terminaría perdiendo a una amiga y capaz dejaría separado al grupo.

La Jose solamente llamó a la Hina, quien no tardó en llegar. No vivían tan lejos y caminando eran unos 15 minutos solamente.

—Holi, holi.—Besó su mejilla.

—Hola Hinatita. Queríamos hablar algo contigo, o más bien, el mikey.

—¿Ah? ¿qué cosa?—Ladeó su cabeza confundida.

—Ven, sígueme.

La Hina asintió, siguiendo a la Jose hasta su pieza donde seguía un Mikey aún tristecito.

—Ay, Mikeycito. —Se acercó a el, acariciando su csbecita.—¿Qué pasó?

—Hina..—La miró, estirando luego sus brazos para así abrazarla.—Hina, perdón.. perdón, perdón.

—¿Perdón por qué?—Habló algo confundida, mientras lo acurrucaba.

La Jose estaba viendo todo desde el marco de su puerta, sin interrumpir.

—Quería decirte que.. Bueno, tu cachai como nos llevamos con el Take, ¿cierto? —Frotó su nariz.—A mi al Take.. me gusta. Me gusta muchísimo..

—Lo sé, Mikey.—Suspiró, mientras lo tomaba de sus mejillas.—Desde que te conozco, mirai de una manera al Take que es.. una mirada de enamorado.

—¿De verdad sabes..?—La miró a los ojos, volviendo a llorar.—Bueno.. Una vez nosotros dos curaos, terminamos en.. en eso..

—¿Ah..? ¿a qué te.. refieres?

—No pasó una vez solamente. Cuando me intenté alejar de el, volvía a hablarme.. una vez más, terminamos acostandonos los dos volaos y curaos.—Cubrió su rostro.—La última vez que vino pa mi casa, le dije todo. Eri mi amiga Hina, y no mereces que te caguen de esa forma.. ¡eri una mina muy linda Hina! Y taba chato de tener que callar esta wea, por que pucha.. te conozco a ti desde que empezaste con el Take y no mereces esa wea, para nada.

—Yo..

La Hina se quedó callada un rato. Bajó por un segundo su mirada, pues estaba llorando en ese momento.