Jungkook siempre fue la oveja negra de la familia Jeon mientras que su hermano gemelo; Jihyun, era el prodigio. Luego de años de estar fuera del país, recibe un extraño mensaje de su hermano;
❝─Necesito que te hagas pasar por mi, incluso con mi esp...
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─¡Es la última vez que me arrebatas el celular así, Jeon!
Exclamó por enésima vez con enojo el pelirrojo persiguiendo a su hermano. El mayor caminaba por la cocina con tranquilidad, sin prestar atención para nada a la rabieta de su hermano. Jungkook rodó los ojos mientras servía el líquido en un vaso transparente. Jihyun apretó sus dientes y cruzó sus brazos sin paciencia esperando a la respuesta del castaño.
─No quiero que lo primero que me reciba en Seúl sea un Jimin enojado por tu estúpida falta de atención, tómalo como un ensayo de mi parte ─dijo sonriendo con diversión mientras bebía el jugo bajo la mirada irritada de Jihyun.
─Yo jamás diría esas cosas, Jimin sabe que el trabajo es muy importante para mí ─aclaró mientras apoyaba levemente su cintura en el borde de la encimera.
Y era cierto. Jimin era una persona muy (demasiado) comprensiva y eso Jihyun lo sabía. Era rara la vez que se enfadaba por sus asuntos de trabajo por eso es que tampoco solía pedirle disculpas o cosas así cuando no le prestaba atención. Jungkook bufó dejando todo lo que había utilizado en su lugar. Obviamente Jihyun jamás le pediría perdón a nadie aunque la culpa fuera suya y eso era algo que le irritaba. Se supone que los tres recibieron la misma educación, con los mismos modales y principios. Al parecer no tenía nada que ver en como serían al crecer.
─Si sé que de seguro pones cualquier cosa por delante de la persona que te ama ─su tono se volvió serio mientras se acercaba a su hermano─. Pero yo no.
Jihyun rió levemente con ironía. Claro que su hermano, "el angelito", no lo hacía─. La diferencia es que me ama a mi, no a ti.
Jungkook imitó su gesto, riendo y dando un paso hacia él─. Pues por un tiempo, no será a ti precisamente.
La tensión podía cortarse con cuchillo. Ambos orbes tan oscuros como lagunas negras se miraban fijamente, como si pudieran leerse uno al otro, sin tapujos y sin mentiras. Jihyun esbozo una sonrisa ladina, enarcando su ceja. Su narcisismo brotaba por cada uno de sus poros y no se molestaba en ocultarlo. Luego de darle un golpe en el hombro, Jungkook caminó hacía la sala donde anteriormente estaban viendo una película junto a Yoongi y Jihyo (quienes ya estaban en sus habitaciones). El pelirrojo apretó su mandíbula con levedad, le molestaba que Jungkook lo conociera tan bien que no se tragara ninguna excusa suya. Incluso llegó a pensar que tal vez no era buena idea.
Pero no, tenía que hacerlo.
─Ah, por cierto, papá sabes diferenciarnos. ¿Si lo sabes, no? ─advirtió Jungkook con diversión.
Jihyun volteó rápidamente, siguiéndolo por la sala.
─No es cierto, ¡Nos tiene agendados como 'hijo uno' e 'hijo dos', si nos pusiéramos la misma foto de perfil no sabría quien es quién.
Jungkook se detuvo repentinamente. Sintió como su hermano chocaba contra su espalda. El castaño negó con su cabeza, a veces era idiota ese hombre.
─Tu lo has dicho, Jeon ─razono al voltear, encontrándose con el pelirrojo sobandose la nariz─. Foto, pero en persona...
