TODDLER | Mark Lee

17

Estar con la compañía de Jeno me hizo sentir mejor de alguna manera. Él era el tipo de persona que irradiaba confianza y tranquilidad, y era muy educado, lo que lo volvía prácticamente un caballero.

Me acosté en su cama, y él se quedó sentado, mirándome con curiosidad.

—Nunca me había sentido tan regañado en toda mi vida— comentó, haciéndome reír y aligerando un poco más el ambiente. —¿Realmente fue por el queso?

Mordí mi labio inferior, mirando el techo desnudo de su habitación, sin las estrellas que me había acostumbrado a ver cada vez que levantaba la cabeza.

—No, no fue por eso— confesé luego de unos segundos —hay algo que me mantiene un poco estresada.

—Yo diría que mucho, para haber soltado tantas palabras sin respirar.

Volvió a hacerme reír, y me sentí más relajada, destensando mis hombros.

Era sorprendente, que dada la cantidad de cosas que había vivido Lee Jeno desde su infancia, había crecido como un hombre amable y empático, y más que sorprendente, era admirable.

—A veces quisiera que todo vuelva a ser como antes— susurré, cerrando mis ojos —, antes de que fuera raptada, era más sencillo.

No escuché nada por un momento, hasta que la cama se movió, y supuse que se acostó a mi lado porque sentí su calor corporal.

—Nunca fue sencillo— dijo, con voz suave —nuestras vidas nunca fueron sencillas de ninguna manera.

—Sí, pero…— resoplé —antes sabía lo que tenía que hacer, y lo hacía. No me costaba tanto, ahora siento que soy otra persona y estoy aprendiendo a caminar de nuevo.

—Pero dentro de todo, sigues siendo la misma, Eun— su tono de voz llegó cálido a mis oídos —, Y aún si no fueras la misma, está bien, porque eres una gran persona— abrí mis ojos, volviendo a enfocarme en el techo —Lo que te esté pasando ahora no es suficiente para destruirte, estoy seguro de eso.

—¿Por qué?

—Porque ya hubieras muerto en la carretera— su respuesta hizo que me quede sin respirar por un par de segundos —, estabas tan golpeada que no pude reconocerte, es increíble que hayas aguantado tanto tiempo, aunque sea como un trapo. —se volteó a mirarme —Hasta Taeyong hyung estuvo de acuerdo en que él no hubiera resistido en la carretera, pero tú lo hiciste, te mantuviste con vida hasta que te encontramos. Si eso no pudo matarte, ¿crees que cualquier cosa lo hará ahora? Eres increíble, Eunyeong, y eres mucho más valiente de lo que puedas imaginar.

No recordaba mucho de la carretera, solo tenía memorias cortas hasta donde vi por última vez a Mr. Kang, pero me dijeron que pasé horas sobre la tierra y respirando apenas.

El doctor me había dicho luego de tiempo que fue un milagro que mi cuerpo haya resistido tanto.

No le tomé mucha importancia a sus palabras porque seguía sufriendo, pero ahora con la mente más clara… ¿Era así de valiente?