CAPÍTULO III

335 11 3
                                    

Habían pasado varios días desde la tarde en la cafetería, y ninguno de los chicos dejaba de pensar en el otro. Han estaba súper... Disperso. Se pasaba los días en su propio mundo. Mientras, Minho no había parado de sentir mariposas cada vez que pensaba en los labios del menor en su mejilla... Y hoy no era la excepción. Se encontraba en el salón de su casa, con su portátil encendido mientras revisaba su bandeja de entrada en Gmail... O eso parecía. En realidad, estaba mirando la pantalla sin realmente prestar atención a lo que ponía en ella. Se encontraba pensando en el de mirada castaña. Otra vez. Jisung llevaba varios días paseando por la mente de Minho. "¿No se cansa?" se preguntaba Minho, riéndose de sí mismo al pensar en lo cliché que eso sonaría si lo hubiera dicho en voz alta. Una idea pasó por su mente, y pasaron varios minutos de debate mental hasta que, por fin, decidió ponerla en práctica. Levantó su teléfono de la mesa y buscó ese contacto recientemente añadido. Y lo hizo. Le mandó el mensaje. Ya no hay vuelta atrás.

Y para la sorpresa de Lee, un par de horas después se encontraba de camino al parque donde pasaría las últimas horas de la tarde. Y de confusión... Pero eso era algo que desconocía. Pasaron unos minutos, y ya se encontraba en la entrada del parque, esperando con ansias a que cierto omega apareciese por fin. " Lo he invocado" pensó Minho, en el momento en el que vio a Han acercándose en su dirección. ¿Por qué lo ha invocado? Pues la respuesta es sencilla. El chico había aparecido en el momento justo en el que la mente del asesino había sacado a flote los recuerdos de esa despedida en su coche. Le causó gracia y ternura la forma en la que el chico caminaba con la cabeza baja, probablemente sintiendo algo de vergüenza y timidez al ver a la persona con quien se siente tan cómodo y entró en confianza con una rapidez increíble... Aunque la causa de sus mejillas levemente rojas no es la confianza o la comodidad, sino el acto atrevimiento que realizó en la última... ¿Se le puede llamar cita?... Ambos chicos dirían " No, es solo una salida de amigos... Bueno, conocidos".JA... Buen chiste.
Minho tenía tantos nervios acumulados en su cuerpo que pensó que, si se encontrase en una habitación, podría empezar a subirse por las paredes. Por otro lado, Han estaba igual o incluso peor que el mayor. Sus manos, dentro de los bolsillos de los vaqueros ajustados por los que tanto trabajo le había costado decidirse, estaban sudando. Jisung no tenía idea de como podían estar tan pegajosas. Ni tampoco sabía el porqué... O no quiere aceptarlo.

Una vez Han se encontró frente a Minho, se dio cuenta de un no tan pequeño detalle. Minho se había teñido el pelo de plateado. "Al parecer nos hemos puesto de acuerdo" pensó el de mejillas de ardilla, ya que él, al igual que el ahora peliplata, se había teñido el pelo, pero no de un color tan llamativo. Él se conformó con un simple negro. Ambos se quedaron completamente sorprendidos, y se podía deducir con una simple mirada. Minho tenía los ojos como platos, y Han... Bueno, Han tenía la mandíbula más dislocada que cuando cierto pollo le dio una patada en que era una mezcla de patada voladora y patada de grulla.
Cuando se dieron cuenta de sus expresiones, los colores no tardaron en subir a las caras de ambos. Y por fin se dignaron a hablar.

- Wow... Simplemente wow... Estás increíble. - Dijo Minho, y los colores en la cara de Jisung se intensificaron. -

Una sonrisita tímida se asomó en los labios del luchador mientras bajaba su cabeza, en un intento de que el peliplata no notara el efecto de sus palabras... Pero fue en vano.

- Gracias... Pero no te quedas atrás. Simplemente mírate. - Esta vez es el turno de Lee de parecer un tomate. Y a Han le pareció jodidamente tierno... No se explicaba como el "intimidante" Lee Minho podía tener una faceta tan tímida. -

- No es para tanto... ¿Entramos ya? - Dijo Lee. -

- Que no es para tanto dice... - Murmura Han, pidiéndole a Dios que el mayor no le haya escuchado... Lástima que la deidad no le haga ni puto caso. -

{*MURDERER*} Minsung Donde viven las historias. Descúbrelo ahora