Gatito Valiente

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Regresar a la escuela después de los días tan extraños que pasó no es algo que le guste. Siente como si todos en su clase lo miraran con burla, como el omega tímido que es.
Taehyung, tal como lo prometió, se encarga de cuidarlo tanto como puede, tienen una conexión muy fuerte que solo ellos saben cómo manejar. Al parecer su amigo tiene la manía de cubrirlo con su propio aroma fuerte solo para molestarlo, porque conoce que Yoongi tiene una nariz sensible y estornuda con facilidad.
Aunque no tiene por qué quejarse pues el olor de Tae espanta a los Alfas hormonales cuando se sientan todos juntos en la cafetería para almorzar.
Aún siguen teniendo algunos gustos de su infancia, por ejemplo, compartir el almuerzo de cosas dulces que Mami Umji prepara para Yoongi, aunque la mitad termine en el estómago de Tae. El alfa, en cambio, utiliza el dinero de su mesada para invitarle dulces y postres de la cafetería a Yoongi.
A veces otros estudiantes los miran de una forma... ¿extraña? Y es que ninguno se cree el cuento de que ese Alfa y ese Omega sean simplemente "Mejores Amigos". La mayoría de los estudiantes creen que se acuestan entre ellos, que están saliendo y lo disfrazan con amistad, o que en realidad son amigos con derechos, pero nada de eso es verdad. Taehyung y Yoongi si son mejores amigos, tienen pijamadas los viernes por la tarde después de terminar la tarea, se acurrucan juntos en su forma animal porque se sienten cómodos con la presencia del otro, pero tanto su Alfa como su Omega se reconocen entre ellos como si fueran hermanos. Lastimosamente las mentalidades de algunos son tan cerradas y vagas, además de perversas, que en cualquier situación quieren comprometerlos amorosamente.

- Yoon, sobre la pijamada de mañana ¿en tu casa o en la mía?

- Pues... mami Umji va a preparar las fajitas de pollo que te gustan.

- No se diga más, en tu casa será.

Antes de acordar quién los llevaría a su casa un tonto Alfa de segundo año interrumpe su conversación, sentándose entre ambos para molestarlos como siempre. Aunque ya falten pocos minutos para regresar a clases, no se salvan de las burlas de ese tonto.

- Saben, no puedo creer que sigan diciéndole "Mami" a su madre. Que infantiles.

Taehyung está por responderle que mejor se largue a la mierda, pero al parecer que Yoongi se haya presentado al fin le ha dado el valor suficiente para defenderse de aquellos que siempre lo molestan.

- Que tu madre no te quiera no es mi problema. - Escupe con odio y algo de elegancia, guardando sus cosas y recogiendo la basura de la mesa.

Tal vez esa pequeña humillación fue suficiente para ese intento de Alfa, piensa Yoongi, pues se a quedado mudo después de eso. El timbre suena y tanto él como Taehyung recogen sus mochilas y se dirigen a sus clases, de no ser por el comentario más asqueroso que una persona sin cerebro pudo pensar.

- Al que su madre no quiso fue otro. Eres y serás un sucio gato de la calle, no engañas a nadie, gato recogido.

Bien, eso fue más que suficiente para dejar de lado su amabilidad y su educación. Sus colmillos gatunos hacen acto de presencia, seguido de unos ojos ámbar con un brillo hipnotizante. Taehyung también ha dejado salir a relucir sus colmillos de zorro cazador, incrédulo de que ese tipo haya dicho algo tan nefasto como eso.

- Uy, las gatas dejaron salir los colmillitos de leche.

- Más te vale que cierres el hocico. - Gruñe Taehyung, apretando los puños para intentar calmarse y no soltarle un puñetazo en la nariz.

- ¿Oh si no qué? Alfita de quinta.

- Te voy a romper los dientes. - El lado omega de Yoongi también se hace presente, dispuesto a golpearlo, aunque sus manos terminen sangrando. Aunque mejor iba a hacer algo más correcto y perverso. Le hace una seña a Taehyung para que se retiren a clases, aunque ya vayan tarde, pero todo es parte de su inteligente plan para no salir perjudicado alguno de ellos. Toma su teléfono discretamente, abriendo la cámara y escondiéndola de manera estratégica en la bolsita de las correas en su mochila. Tan pronto como dejan hablando solo al Alfa, este se enoja y deja caer un golpe limpio en el rostro de Tae.
Sin embargo, su amigo simplemente sonríe y se limpia la nariz con una servilleta, volteando a ver a Yoongi.