I won't give up; Freenbecky

Capítulo 21

-Belove mi amor el desayuno está listo- gritó Belove sirviendo en los platos los huevos revueltos que había preparado para la ojiazul- Belove- volvió a llamarla hasta que por fin la pequeña apareció en la cocina abrazando a su rosado peluche.

-Buenos días mamá- saludó sentándose en la mesa que estaba frente a la cocina, Belove suspiró sonoramente llamando la atención de Becky.

-¿Estás bien mi amor?- preguntó- Desde ayer estas apagada ¿No estás feliz de que desperté?- preguntó.

-Claro que si mamá- se apresuró a contestar, la castaña colocó el desayuno en la mesa y tomó asiento frente a su hija- Es solo que...mamá Freen estaba llorando ayer- dijo agachando la mirada- Yo no quiero que ella esté triste.

-¿Estaba llorando?- preguntó tratando de ganar tiempo sin saber qué responder.

-Mamá- se quejó, no había manera de mentirle a Belove- Yo creo que esta triste porque vine contigo.

-Mi amor ya desperté, tenias que volver conmigo a casa, con mamá- trató de explicarle suavemente.

-Ella también es mi mamá- Becky tuvo que apretar los dientes para no soltar ningún comentario que dañara a su hija, al parecer Belove ya estaba lo suficientemente encariñada con la ojimiel- ¿Por qué no dejas que ella venga aquí? Así no está sola.

-Porque ella tiene su apartamento y debe cuidarlo.

-Entonces vamos a vivir con ella- le pidió- Tú puedes dormir con ella y yo en mi habitación, ya sé que ustedes eran novias y se besaban en sus bocas ella me lo contó- la castaña no sabía si reír ante la inocencia de su hija o ir a matar a Freen por soltar su lengua.

-Yo debo cuidar de esta casa- trató una vez más- Además ya estoy aquí, no necesitas otra mamá, yo voy a cuidarte siempre- Belove suspiró sonoramente y asintió con la cabeza- Ahora desayuna que luego iremos a ver a tía Irin y tía Mint que se pondrán muy contenta al saber que regresaste.

-Está bien- dijo sin estar muy convencida- Pero ¿puedo ir a ver a mamá Freen mañana?

-Ya lo veremos- respondió levantándose de la mesa- Ahora desayuna.

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Freen entró a su oficina sorprendiéndose al notar quien la esperaba, aquel día había llegado un poco más tarde porque tuvo que pasar por su departamento a alistarse y luego salir al banco, aunque había dormido sin interrupciones y por al menos nueve horas su cuerpo de sentía agitado, al parecer su cansancio emocional estaba afectándola.

-¿Qué haces aquí mamá?- preguntó sacándose la chaqueta y colgándola en su perchero para luego tomar asiento.

-Dime por favor que Belove está en clases y que tardaste porque pasaste a dejarla- dijo con alguna lágrimas en los ojos.

-Lamentablemente no- dijo suspirando- Siento no haberte llamado ayer, no está en condiciones.

-¿Entonces Rebecca fue a tu casa?- preguntó.

-Si y se llevó a Belove- trató de mantener su compostura- Además tengo un juicio dentro de un par de días y me pidió que renuncie a cualquier derecho que pudiera tener sobre Belove.

-No pensarás en acceder a semejante locura- Freen no respondió y simplemente miró hacia afuera y la maravillosa vista que tenía- No puedes hacer eso, es tu hija es mucho más hija tuya que de ella ¡Freen!- gritó llamando su atención.