Han pasado 5 años desde... desde que la mitad del universo desapareció.
Aún recuerdo ese día como si hubiera sido ayer, recuerdo la mirada asustada de mi madre, la preocupación de mi abuelo y las lágrimas sobre las mejillas de mi abuela, nos tomó tiempo asimilar lo que había sucedido, y bueno, luego de que los vengadores anunciaran lo que había ocurrido tuvimos que adaptarnos a nuestra nueva vida, solo mi abuela y yo, juntas.
Afortunadamente no nos faltaba nada para vivir, teníamos suficiente dinero, y mi abuela trabajaba en su restaurante, no era muy grande pero la comida era deliciosa, siempre suelen tener mucha clientela, y yo suelo ayudarle por las tardes luego de clases y luego de hacer mi tarea, no me paga por supuesto, yo ayudo porque me nace, no necesito nada a cambio.
Por otro lado, parece ser que Spiderman había sido de aquellos que fueron afectados por el chasquido del gigantón morado, desde ese día nunca se le volvió a ver de nuevo, y era... extraño, por más que no me agradará, por alguna razón su ausencia se sentía mal, no me alegraba que ya no estuviera, comenzaba a notar lo que él hacía, sus pequeños actos mantenían la ciudad un poco más tranquila, entendí que él detenía a los ladrones, bien decía ser nuestro amigo y vecino Spiderman... podía decirse que llegué a extrañarlo, pero antes de él no había Spiderman, así que no era muy difícil acostumbrarse a qué no estuviera, era raro, sí, pero su presencia no era indispensable... eh creo que me he contradecido un poco, pero lo que quiero decir es que... puede que no sea tan malo como parecía serlo, aún lo odio, solo... ya no está aquí.
Todos los fines de semana visitaba mi departamento en el que vivía con mamá, debía mantenerlo limpio y ordenado, quizás algún día vuelva mamá y no quisiera que se enfade conmigo, seguro que me daría un gran castigo si regresará y viera la casa llena de polvo y telarañas.
Sonreí ante mi tonto pensamiento, extrañaba incluso los regaños de mamá, me hacía tanta falta... y el abuelo, dios, jamás había visto a mi abuela tan triste, luego de que el abuelo despareciera junto con mamá fue difícil no darme cuenta que la abuela fingía estar bien por mí, podía escuchar sus lamentos en la noche, sé que ella deseaba a veces haber sido "evaporizada" como el abuelo, pero se mantenía fuerte, por mí, y yo por ella, debíamos cuidarnos una a la otra después de todo ¿No?
Cambiando de tema, hoy, 17 de octubre de 2023, es mi cumpleaños número 17, wow, es mi cumpleaños de oro, cómo pasa el tiempo ¿No es así? He crecido bastante a decir verdad, ya no mido metro y medio, ahora mido 1.60, claro que sí, ahora soy un minion grande, no sé qué clase de comida les den a mis compañeros pero todos son más altos que yo. Y hablando de compañeros, durante estos años hice un nuevo amigo, Shawn, un chico de 1.80, pelo castaño y ondulado, algo fornido y bastante nerd, más que yo de hecho, pero lo oculta, prefiere mostrar lo "cool" que puede ser, suele salir de fiestas últimamente, me ha invitado algunas veces pero no siempre voy, no es mucho mi ambiente a decir verdad.
Entré a la pastelería y me saqué los audífonos para escuchar mejor a la chica detrás del mostrador.
–Buenas tardes, ¿En qué puedo ayudarte?- preguntó con una cálida sonrisa en el rostro.
–Vengo por un pastel que aparté de red velvet, a nombre de ___- dije devolviéndole la sonrisa.
–¡Ah claro! Dame un momento y lo traeré.
Asentí y ella se fue a la parte de atrás, supongo ahí tienen los pedidos listos. Mientras esperaba, mi celular comenzó a sonar, lo saqué de mi bolsillo para revisar quien era, era Shawn así que deslicé el botón verde para responder.
–Hola jirafa- dije burlona.
–Hola pitufo- respondió de la misma forma.- ¿Lista para hoy?
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I hate you, Spiderman [Peter Parker y tú]
Fanfiction____, la hater #1 de Spiderman, y la más jóven pues tan sólo a sus 12 años eran sumamente inteligente e intrépida, siempre aprovechaba la oportunidad de acercarse a sus héroes favoritos y verlos en acción cada que algún villano atacaba, y claro, en...