EN EL JARDIN DE ROSAS Tomo 7 - Into the garden rose

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La tarde siguiente al incidente, fui a visitar al enfermo y volví a encontrarme con la criada severa y aterradora.

"El Maestro está durmiendo ahora".

"¿El pronóstico es malo? O no... ... ."

"La lesión se está recuperando bien. Sólo que no ha superado su fatiga física y mental".

El ama de llaves, que respondió de pie en la puerta principal sin invitarlo a entrar a la casa, miró a Arok de arriba abajo con una mirada fría.

"¿Puede decirme quién es usted?"

"Arok Taywind".

Arok sacó una tarjeta de presentación del bolsillo interior de su chaqueta. Sacó una tarjeta blanca, de las que rara vez daba a nadie, y se la tendió. No solía exagerar sus credenciales ante los plebeyos, pero quería dejar claro quién era, incluso ante una criada maleducada como su empleadora, que mostraba una sutil desconfianza. Al aceptar la tarjeta, que estaba hecha del mejor papel disponible en el continente, la criada la hojeó de un lado a otro y luego habló con gravedad. 

"Usted debe de ser el famoso Conde"."Creía que no lo sabía, señora".

La actitud era tan mala que pensé, por supuesto, que no lo sabía. Cuando reaccionó con el ceño fruncido, el ama de llaves dijo: "Claro que lo sé, es el nombre con el que vive mi amo". "Por cierto, yo soy Martha".

"De todos modos, mi excéntrico maestro no está en condiciones de encontrarse con el Conde en este momento, así que ven la próxima vez. Le diré que he estado esperando verlo".

Le hizo un gesto urgente mientras intentaba cerrar la puerta unilateralmente. No es que no quisiera hablar con Martha, la criada, que sólo preguntaba con la mirada si había más asuntos. En lugar de eso, hizo una señal al carruaje familiar que esperaba junto al camino..

"Tráelo."

Un empleado acompañante vino con una canasta grande. Dentro de la canasta, decorada con flores cultivadas en la mansión, había tés de hierbas conocidos por tener un efecto excelente para calmar la mente y el cuerpo, y mermelada de rosas hecha el año pasado. Si es posible, quería decorar con rosas, pero las rosas aún no estaban en temporada.

"No he venido a tu puerta con las manos vacías"."Gracias".

Impresionada por la canasta, Martha luego mostró una sonrisa humana. De todos modos, el dueño y el ama de llaves fueron geniales.

"Le ofrecería té, pero estoy atendiendo a su.......""No importa, vendré en otra ocasión".

Arok puso su mano en su sombrero de seda por un momento y se despidió del ama de llaves.

No fue una lesión, pero se dijo que estuve durmiendo todo el tiempo porque estaba demasiado cansado. Las secuelas de una sobredosis de tranquilizantes eran evidentes.

"¿Qué tipo de droga es?"

Lo había visto tomar esa droga antes. Pensé que era solo un simple medicamento para el dolor de cabeza. Sin embargo, a juzgar por la mirada sorprendida del médico y la actitud sensible del ama de llaves, parecía que no era solo un dolor de cabeza.

Lo más extraño es que sólo tomó la dosis prescrita por su médico e intentó dar un paseo para calmar los nervios. ¿Para qué iba a necesitar una espada, y menos aún un paseo por calles tan sucias y abarrotadas? Si tenía la presencia de ánimo para ir tan extrañamente armado, debía de saber que los bajos fondos eran el peor lugar para dar un paseo en busca de paz. Me pregunté qué significaría un paseo para él.

"Tienes mucho que preguntar".

Mi gerente financiero era demasiado reservado.

"La primera reunión también fue extraña".

Fue su inesperado comportamiento lo que me había hecho recelar y mostrarme reticente en primer lugar. No sólo irrumpió, sino que exigió saber por qué Aylock fingía no conocerle. A-Rok, que a menudo ve obras de teatro de alta calidad y actuaciones de primera, se enorgullecía de tener buen ojo para distinguir la sinceridad de la actuación. No era el juego infantil que usaba la dramaturgia para tratar de llamar la atención. Sus ojos eran extremadamente sinceros, y su expresión y comportamiento irradiaban sinceridad.

En su primer encuentro, lo había alejado de una forma bastante brusca para su propia protección, pero ¿acaso solía estar tan maliciosamente obsesionado? Había habido unos cuantos hombres que le habían hecho cosas extrañas a Arok en su vida, pero ninguno que le guardara rencor. Eso se debía a que nada bueno podía salir de ganarse el odio del conde de Taywind. La mayoría de ellos se disculpaban por su descortesía con una cómica falta de gracia al reencontrarse.

En comparación, Bendike se mostraba extraordinariamente tranquilo y distante para un hombre que había cometido semejante locura. Me miró con una mirada penetrante que distaba mucho de ser amistosa. Era como si considerara a este hombre un gran peligro. . Era un campo enemigo.

"No sé qué tipo de enfermedad mental tienes".

El carruaje condujo rápidamente por la calle principal en dirección a la mansión. Al otro lado de la ventana oscilante, pasaba el camino hacia el fondo. Estaba claro que cualquier cosa que se hiciera allí no era buena.

Klop Bendike.

Las ondas en su despreocupada vida habían crecido y crecido, y ahora eran imposibles de ignorar. Fueran cuales fueran los secretos que escondía, era hora de descubrirlos.

* * *