"Obra Musical"

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"¿Por qué te gusta tanto la música? Por qué es lo único que me hace olvidar todo y a todos"


Davina

No he visto a Lucien desde que se fue de mi casa ese día, la verdad no se si quiero verlo todavía. Mis emociones están revueltas mi mente solo quiere apagarse por completo y no pensar. Mi único y mejor escapatoria ahora es el piano así que pase estos dos días practicando en mi cuarto y en el salón de música en la que me quedaba de pues de clases mientras espero a Xavier para que me regrese a casa.

Me llega el mensaje de el de que su practica termino así que le contesto que voy saliendo. Tomo mis cosas, pero en la puerta me encuentro a mi profesor de música.

—Profesor— lo saludo.

—Davina, que gusto encontrarte antes que te fueras.

—¿Necesitas que le ayude en algo?

—Si, de hecho, veía a pedirle su ayuda para la obra musical.

—Y... ¿Cómo podría ayudarle?

—Hija tu tocas y cantas maravilloso, por ello quiero que toques tu en el acto final, a la chica que tenia se enfermó. Solo tengo la esperanza en ti.

—Bueno yo...

—Se que te pone nerviosa, pero te aseguro que estarás bien, solo pon tu atención en un objeto especifico y has como si estuvieras sola.

—Amm... claro. Lo intentare.

—Eso es una buena noticia, lo aprecio mucho. Mañana te daré la información y el vestuario que necesites. Lo harás bien, la obra es este viernes.

—Okay, lo vere mañana profesor.

Me despido para correr a la salido donde esta Xavier esperándome.

—¿Por qué esa cara pulga?

—Amm... me invitaron a tocar en el musical del viernes.

—¡Enserio! Eso es una muy buena noticia.

—Si, creo que si — le sonrió empezando a sentir emoción, el procede a abrazarme en celebración.

...

Paso los siguientes días practicando la canción, me dejaron elegir con tal fuera con la escena. La última escena estaré a un lado mientras los actores bailan al ritmo de la canción. Mi elección me tiene contenta, creo que es de las mejores que puedo cantar y tocar a la vez. Termino mi practica y espero a Xavier en las escaleras del campo mientras termina su partido.

Me quedo viendo mi celular unos segundos y la imagen del Lucien viene a mi mente, el deseo de escribirle crece. Se que el se a comunicado con mi mejor amigo, pero nosotros no hemos tenido conversación desde esa tarde.

Decidía decido escribirle.

¡Hola! ¿Cómo estás?

Amm, solo quería invitarte a la obra del viernes, tocare y cantare. Por alguna razón siento que te gustaría ir a verme. Pero si no puedes esta bien.

Veo los mensajes enviados, trato de alejar la ansiedad de borrarlos guardando mi celular. Decido enfocar mi atención en mi mejor amigo que celebra junto a sus compañeros que metieron gol. Sonrió al verlo tan alegre, todo sudado y gritando de emoción. Ya hace tiempo no lo veía jugar y me alegra poder apoyarlo aquí.

...

Llega la noche, y Xavier pasa detrás mío mientras de alguna manera me ayuda a lidiar con la ansiedad que siento brota por mis poros. No e visto ni escuchado señales de Lucien, pero por suertes Ren y Vilma están presentes. De hecho, Vilma se ofreció a maquillarme cuando se enteró.

El Ángel del DiabloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora