Verliebt in die Braut. (Marco Reus)

She is getting married?

Capitulo 2.

Marco (Narra): Había llegado a casa de mis padres, miré por unos segundos la entrada y millones de recuerdos golpearon mi mente, recuerdos donde las risas y abrazos junto a ella eran perfectos.

Suspiré y camine hacía la puerta, cuando está se abre y veo a mi madre muy feliz.

-Marco! Te tengo muy buenas noticias- Dijo mi madre Manuela emocionada.

Yo: ah, si? (confundido)

Manuela: pasa (Sonriendo)

Mi madre se hizo a un lado, antes de pasar, besé su mejilla y pasé.

Yo: y bien? (le pregunté esperando una respuesta)

Manuela: (suspiró) Arabelle esta en Dortmund (Dijo aun más emocionada que antes)

Yo: qué? (sorprendido)

Día y Noche durante años le rogué a Dios que mi Arabelle regresara a Dortmund, que todo fuese como antes de que partiera de Dortmund, pero nunca fue así. Y ahora mi madre me dice que estaba aquí, vaya que si fue una sorpresa.

Yo: bromeas verdad?

Manuela: Marcos Reus! Como piensas que estaría bromeando con algo que es tan importante para ti.

Mi madre siempre supo que estuve y que estoy aun estoy enamorado de Arabelle.

Yo: (Suspire) creo que será mejor irme.

Manuela: no te quedaras a verla.

Yo: no lo creo (triste)

Manuela: Cielo (yo interrumpí a mi madre)

Yo: no creo que me quiera ver.

Manuela: como sabrás si no te quedas? (Acaricio mi mejilla)

Yo: (tome aire) bien, en donde están Yvonne y Melanie?

Manuela: vienen en camino, te quedaras a cenar?

Yo: (le sonríe) que crees (risa)

Manuela: (mi madre me da un beso en la mejilla) ella se alegrara de verte (sonriendo entro a la cocina)

-Esto debe ser un sueño-Pensé.

Un sueño que siempre quise que se cumpliera y ahora después de ocho años se haría realidad.

Subí las escaleras para ir a mi habitación. Mientras caminaba la palabra "regresaría" retumbaba en mi mente y en mis oídos, -esta vez haría las cosas bien, me ganaría su amor, sin importar que nuestra amistad quede atrás-.

Al entrar a mi habitación, me acerqué a la ventana la cual daba hacia la ventana de la habitación de ella.

Fue entonces que recordé que antes de dormir: nos mirábamos y sonreíamos.

Yo: (Suspiré) No dejare que te vuelvas a ir, no otra vez (susurré)