Hope

4- Tiempo después...

Todo está a oscuras, no se dónde estoy.

Una cama, alguien durmiendo. No reconozco a la persona.

Una sombra al lado, viéndola dormir.

No puedo ver su rostro ni nada, solo es una sombra.

Se acerca a la cama, la ve de cerca e intenta agarrarle un brazo, ahogo un grito, cuando la sombra se da cuenta de mi presencia la suelta y se esfuma.

🕯️

Salgo de mi primera clase y voy a desayunar como siempre, solo que esta vez veo solo a Jesús sentado en un lugar apartado en la cafetería.

Compro mi desayuno y me siento con el.

- ¡Hola! - saludo.

- Hey, Hope! - saluda de regreso.

- Todo bien, y Angélica? - Es raro no verlo con ella o al revés.

- Oh, Ange está enferma por eso no ah venido hoy. - Ahora todo tiene sentido.

- Y eso, que tiene? - Pregunto.

- La verdad no sé, no le han diagnosticado nada los doctores dicen que puede ser una virosís o algo así, en los exámenes no le sale nada y los síntomas que tiene son vómito y fiebre.

- Uy, que mal!!
Lo siento mucho por ella, veré si la visito está semana. - Sé que ella haría lo mismo por mí.

-¡¡ Oye, que buena idea!!
Justo yo iba ésta tarde a su casa a llevarle unas cosas, ¿por qué no vamos juntos?. ¡Estoy seguro que se alegrará de verte!.

- Está bien, así será.

Acordamos la hora, terminamos el desayuno y volvemos a nuestras respectivas clases.

🕯️

Hago una sopa en el almuerzo y aprovecho para llevarle a Angélica, espero le guste porque es la única que se preparar; sopa de pollo y fideos.

Cuando ya está lista, la dejo servida y me voy a bañar.

A la media hora llega Jesús por mí.

- ¡¿Preparaste sopa y a mí no me das?! - Ve la vianda con recelo.

- Sé que siempre te ah gustado mi sopa pero hoy tú no eres el enfermo. - el todo indignado se da la vuelta y sube a su carro.

- Sube antes de que te deje botada por no darme de tú sopa.

- Adolescentes... - Refunfuño.

Cuando llegamos a casa de Angélica, nos habré la mamá y nos indica que ella está en su cuarto.

Subimos y en cuanto llegamos Jesús se lanza prácticamente encima de ella en la cama.

- Ange, mi amor, cómo estás?
Vine con Hope, ella te trajo su sopa especial, me puedes dar? - le dice tan rápido que apenas entiendo, poniendo ojitos para que ella se apiade de él.

- Hola amor, claro que sí. - Le responde viéndolo con amor en los ojos.

- ¡Eeeeeeehhh!- Festeja Jesús y rápido me quita la bolsa con la vianda y se va a la cocina.

- Hola, cómo estás?
Jesús me contó hoy en la mañana. - le digo apenas Jesús se va.

- Mejorando, se me acaban de quitar las náuseas.

- ¡Me alegra oír eso! - Le digo de todo corazón.

- Oye no te fueras molestado en preparar sopa para mí. - Me dice, apenada.

- Tranquila, no es molestia. - Respondo.

- Bueno. Y por qué Jesús dice que tú sopa es especial? - Pregunta.

- ¡Ah eso, jajaja, bueno me imagino que le dice así porque no se la cocino a cualquier persona!. - Me inquieta admitir en voz alta que prácticamente ellos son mis únicos amigos.

- Ah okey, en ese caso muchísimas gracias!.

Se intenta sentar y la sabana se le baja, inmediatamente mis ojos van a una marca en su brazo que llama mi atención.

- Angélica, que te pasó en el brazo? - le pregunto acercandome.

- ¿ Que brazo? - Mira a donde yo miro desconcertada.

Le levanto el brazo y veo mejor la marca de unos dedos alrededor de su brazo.

- Ésto, que te pasó? - me asusta que alguien la allá maltratado.

- ¿ Que Hope, en donde? - ella se queda viendo a donde yo miro pero es como si no viera nada.

- ¿ Que ves aquí? - le pregunto.

- No hay nada Hope. - Me ve extrañada.

- Bueno seguro es mi imaginación.

De inmediato recuerdo el sueño que tuve hace dias y empiezo a mirar todo a mi alrededor y me voy hacía la ventana que está al lado de la cama, cuando me coloco hay y veo hacía la cama, reconozco por completo todo ya que no hay suficiente luz en la habitación puedo darme cuenta de que es la misma de mi sueño. Solo que ahora se quien era la persona dormida en la cama.