'tis the damn season - 5SOS.

04 - Shivers.

06 de Diciembre, 2019.

Neva's pov:

El día anterior, después de hablar con mi mamá y ser consolada con sus deliciosas galletas de chispas de chocolate, me tranquilicé y bajé a cenar con ambos de mis padres. Papá había hecho mi pasta favorita de cenar, era justo lo que necesitaba.

Mi comida favorita con mis personas favoritas.

Al terminar mi cena volví a mi cuarto y logré escribir un capítulo entero para mi novela, bueno era más un borrador porque necesitaba pulirlo, pero había salido mejor de lo que esperaba.

Hoy desperté y bajé a desayunar algo de fruta con mis papás, decidimos que saldríamos a comer al viejo restaurante local, tenían comida casera y el lugar era muy acojedor.
A parte, mi tío era el jefe y siempre que iba a visitarlo me regalaba un brownie con nieve de vainilla.

Mi outfit consistía en un pantalon de mezclilla claro con un suéter negro y mis botas de combate también negras, afuera hacía mucho frío así que decidí ponerme mi chaqueta azúl obscura para no congelarme.
Una vez estaba lista, bajé a la sala en dónde mis papás estaban esperándome, decidimos tomar el carro de mi papá y al subirme sentí que era niña de nuevo.

Manejar por las calles de mi ciudad, cantando las canciones de la radio con mis papás y hablando sobre lo que íbamos a comer con el tío John, no podía ser más feliz.

Tomé mi celular y comencé a escribir notas, ideas que podría utilizar en un futuro para mí libro, escenarios pocos probables que pasaran en la vida real. Escribí todo y perdí la noción del tiempo, cuando me dí cuenta ya habíamos llegado al restaurante de mi tío.
Bajamos del auto y caminamos hacia la entrada, encontrándonos con mi tío, el cuál nos dijo que nos estaba esperando para atendernos y acomodarnos en nuestra mesa favorita.

— ¡Dios mío, Neva! Estás hermosa, te hemos extrañado tanto – mi tío John me abrazó y le devolví de inmediato el abrazo.

— Yo también los he extrañado un montón, y gracias por el cumplido, tú te ves demasiado bien para tu edad eeeeh – mencioné la broma que nos hacíamos desde que estaba chiquita.

— ¿Para mi edad? ¡Si apenas tengo 47!, Al único al que se le nota la edad acá es a tu papá – mi tío comenzó a reír ante la mueca plasmada en la cara de mi papá.

— Solo soy tres años mayor que tú John, como te ves me ví y como me ves te verás – todos comenzamos a reír por la frase tan boba que era parte del vocabulario cada vez que visitábamos a John.

Pronto nos sentamos en nuestra mesa y una mesera vino a tomar nuestra orden, pedí espagueti con queso crema y chile serrano, también conocido como espagueti verde, este tenía pedazos de pollo y champiñón, con un puré de papa como acompañante, era delicioso.

— En un momento vengo, tengo que ir al baño – me disculpé y comencé a caminar hacia los baños.

Tomé mi celular porque recibí un mensaje y sin querer terminé chocando con alguien que venía saliendo del baño de hombres.

— ¡Lo siento mucho no te ví! – exclamé con intenciones de seguir disculpándome, pero las palabras abandonaron mi cerebro al ver sus ojos.

— ¿Neva? ¿Eres tú? – escucharlo decir mi nombre mandó una corriente eléctrica por mi espalda.

— Ashton...– estaba congelada, por alguna razón verlo a él me impactaba más que ver a los otros tres.

— No lo puedo creer, los chicos me habían dicho que estabas aquí, pero no ni creí que te veías tan... diferente – Ashton acercó su mano a mi rostro y quitó un mechón de mi cara para observarme mejor.

Si había cambiado no puedo mentir, la última vez que nos vimos tenía casi todo el pelo pintado de rojo y más quemado que nada, antes solía planchar y estilizar mi cabello todos los días. Ahora salía con mis ondas naturales siempre y mi cabello había vuelto a su color original.

— Si bueno, supongo que el tiempo cambia a las personas – que tonta, es la peor frase que pude decir.

— Ahora que mencionas eso... – ya sabía a dónde iba esto y no quería escuchar el resto de lo que tenía que decir.

— Si me vas a invitar a su casa para pasar un día con ustedes y arreglar las cosas, desde ahorita te digo que no – la cara de Ashton ahora reflejaba confusión y un poco de decepción.

— Tú misma dijiste que el tiempo cambia a las personas, no entiendo tu negación rotunda por vernos – sus facciones se habían tensado, parecía estar algo enojado.

— Es que no lo vas a entender, ni tú ni ellos, ustedes no fueron abandonados por el grupo de amigos por el cuál dejaron toda su vida atrás – mis ojos se habían llenado de lágrimas ahora y al parecer los de Ashton también – No tengo ganas de seguir esta conversación, cuídate te veo luego.

Entré al baño dejando a Ashton con la palabra en la boca, limpié mis lágrimas hice mis necesidades y volví con mis papás. Me comentaron que vieron salir a Ashton algo apurado del restaurante y con un par de lágrimas en sus ojos, procedí a contarles todo lo que había pasado.

Una vez más me apoyaron y consolaron, después de platicar y comer por unas horas, mi papá me hizo reflexionar y le dió un poco de razón a Ashton, me dijeron que pensara bien en hablar con ellos, al final de cuentas, tal vez eso me daría el cierre que, realmente, nunca tuve.

Mi tío nos trajo postre y se quedó con nosotros a platicar, al finalizar nuestra comida nos despedimos y volvimos a casa, quedamos en organizarnos para tener una cena familiar pronto.

En el camino a casa no dejé de pensar en la interacción que tuve hoy con mi viejo amigo y en las palabras de mis papás. Tal vez sí necesitaba hablar con ellos, pero realmente no creía estar lista todavía.

Estaba en mi cuarto, le había dado ya muchas vueltas al asunto pero sabía que tendría que hacerlo. Tomé mi celular, marqué su número y después de varios timbres, por fin contestó.

— ¿Estás libre mañana?

— Si, ¿Pasó algo?

— No, solo quería hablar contigo, nos vemos mañana a las seis en punto en el parque, ven solo.

— De acuerdo Neva, te veo mañana.

Sin más colgó la llamada, no sabía si lo que había hecho era lo correcto, pero sentía que lo necesitaba.