THE POWER OF PROPHECY; HOTD

the prophecy of aegon i

! prophecy. ❞

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La luna se encontraba en el punto más alto en el cielo. Se podía escuchar el crujir de los árboles a su alrededor, acompañados de los suaves resoplidos de un dragón. La mirada violácea del hombre de cabellos platinados se mantenía fija en la nada misma, ensimismado en sus pensamientos, mientras que el gran dragón negro sentía a través de su vínculo cómo su jinete cavilaba. Por lo que soltó un gruñido en busca de atención. Aegon I parpadeó rápidamente, retomando la compostura, y se acercó a su compañero, colocando una de sus manos sobre el hocico escamoso de Balerion y así dejando pequeñas caricias que hicieron ronronear al dragón.

Soltando un suspiro, Aegon recargó su frente sobre las escamas negruzcas de Balerion y cerró sus ojos, sintiendo el calor que estas emanaban, relajándose ante el tacto. El Targaryen había sido bendecido con un sueño de dragón, que lo hizo despertar en medio de la noche empapado de sudor y con una respiración errática. Ahora, nuevamente perdiéndose en sus pensamientos, recordó lo que había visto en su sueño.

El techo de la sala del trono estaba destruido por lo que pudo ver en el cielo a dragones peleando entre sí, el trono de hierro, el trono en el que se había esforzado tanto en forjar con las espadas obtenidas en sus batallas estaba bañado en sangre y rodeado de fuertes llamas danzantes. El repentino rugido estruendoso de los dragones había echo que cerrara los ojos y cubriera sus oídos con ambas manos, y al abrirlos nuevamente la sala se encontraba intacta el único cambio fue que por alguna razón estaba cubierta de nieve, a su vez pudo notar que los estandartes de su casa ondeaban en lo alto de la sala en negro y plateado.

Un pequeño llanto llamó su atención, por lo cual dirigió su mirada en dirección al imponente trono de hierro. Al acercarse, observó que ahí sobre la gran silla de espadas se encontraba un pequeño de rasgos valyrios y sutiles rasgos de los primeros hombres, cuando el pequeño posó su mirada bicolor en la suya, su llanto cesó y una tierna sonrisa se abrió paso en el rostro del bebé, y nuevamente la escena cambio.

El sonido de un líquido goteando llamó su atención, lo que le hizo bajar la mirada a los pies del trono notando como un rio de sangre corría sobre los escalones llevando consigo escamas de dragones de color negras y verdes junto a la estrella de la fe de los siete y una variedad de estandartes de casas que no pudo visualizar correctamente, haciéndole fruncir el ceño con confusión.

— Un heredero Targaryen nacerá, fruto de la unión del hielo y el fuego. —comenzó una hipnótica voz— Legitimó heredero al trono de hierro que evitará la destrucción de la casa del dragón. —hizo una pausa— Sin embargo, su estandarte deberá alzar y danzar para así a su sangre salvar y llenar al reino de prosperidad.

Aún con el ceño fruncido por la confusión y parado en el centro del salón, notó que sobre el trono yacía un hombre, un Targaryen de mirada melancólica, que era iluminado por la luz que atravesaba los grandes ventanales. Portaba su corona mientras que en una de sus manos empuñaba el fuego oscuro, este lo observó desde lo alto y le regaló una sutil sonrisa, notando que era el pequeño bebé, ahora en su adultez.

Soltando un suspiro, se separó de su dragón y acarició sus escamas negruzcas antes de dar media vuelta y dirigirse hacia la fortaleza. Al llegar y entrar en su habitación, se encaminó hacia el escritorio situado en una esquina del lugar. Tomó un pergamino y una pluma que sumergió en un recipiente con tinta para comenzar a plasmar lo que sería una profecía que salvaría a su sangre.

"Cuando la casa del dragón comience a fracturarse, un Targaryen, fruto del hielo y el fuego nacerá como un legítimo heredero al trono de hierro, trayendo consigo la prosperidad a su sangre y al reino. Sin embargo, el dragón tendrá que reclamar su legítimo derecho y danzar para así a su sangre salvar."

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empezamos por una pequeña introducción,
espero que les guste el fic y dejen su apoyo.♡