Capítulo 1.1

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Si Yeong fue paciente a su manera, pensó que podría soportarlo hasta cierto punto porque tenía la convicción de que el placer vendría después del trabajo duro. En otras palabras, sabía cómo comprometerse entre las cosas buenas y las malas.

Por ejemplo, no dudó en subirse a un aparato extraño llamado silla del amor cuando creyó que le darían una gran noche. Incluso llegó a pensar que era astuto, cuando sus manos y pies estuvieron atados con la fuerza suficiente al aparato.

Sin embargo, eso no significaba que aceptaría cruzar la línea de mendigar a alguien.

—Si Yeong al parecer está mojado y revolotea como una perra.

Para Si Yeong fue injusto, porque no era una perra, no tenía coño y mucho menos revoloteaba, incluso ni estaba mojado. Estaba acostado en el aparato, por lo que estaba salivando con la anticipación al sexo, pero no hasta el punto de rogar por un pene.

Si Yeong frunció ligeramente el ceño, de algún modo la sensación que tenía se sentía barata.

«¿Debería golpearlo e irme?»

Pero la cara del hombre estaba bastante bien. Mirando hacia la ingle, el tamaño de la polla parecía ser aceptable. Si Yeong aguantó la humillación del hombre, si lo que venía era un juego sucio, podría soportarlo un poco.

—Por favor, date prisa y métela.

El hombre se rió vulgarmente de la respuesta poco entusiasta de Si Yeong, y en ese momento, su excitación se calmó. El hombre pinchó su agujero con el dedo y escupió sobre él. Si Yeong arrugó abiertamente su rostro.

—Oye, perra. ¿No puedes vivir sin pollas? -parloteo el hombre sin sentido.

Si Yeong fue paciente a su manera. Siempre y cuando esté convencido de que la alegría vendrá después de un poco de dificultad... Hasta cierto punto... puede ser tolerante...

«Ja, joder, no puedo soportarlo.»

Si Yeong rápidamente liberó sus miembros atados y pateó el estómago del hombre. Éste cayó al suelo con un grito ensordecedor.

Si Yeong, que se acarició la cabeza, pisó fuerte bajo los testículos del hombre, y éste se retorció como una lombriz.

—Oye, bastardo inculto. ¿Qué estás escupiendo, imbécil?

—Uh, espera... Me duele, duele...

—Incluso si no tienes suerte, estás jodido ¡De algún modo, sería algo como esto! -Si Yeong escupió en su ingle como lo hizo el hombre y se dio la vuelta. Se limpió el trasero con un pañuelo húmedo y se puso su ropa. El hombre se agarró la ingle y rodó por el suelo del motel.

Finalmente, Si Yeong dejó el motel con la espalda inclinada. La ira no disminuyó a pesar de que escuchaba los gritos del hombre. Suspiró mientras retiraba suavemente hacia atrás su flequillo.

«Uf, esta noche estaba completamente descartada.»

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En general, tendía a ser honesto con mis deseos sexuales. Para ser aún más honesto, es más apropiado decir que es tímido en lugar de ser abierto. Si Yeong no estaba particularmente avergonzado de su extraordinario deseo sexual, de todos modos Alfa y Omega son la evolución humana optimizada para el sexo. El hecho de que Si Yeong sea un omega le dio validez a su desbordante deseo sexual, ya que la culpa era de las hormonas que hacían que actuara incorrectamente.

Ser omega venía elegantemente empaquetado con un ciclo de calor, muy conveniente para Si Yeong porque siempre estaba caliente. Aunque era un estorbo que su estómago doliera siempre durante los primeros días del calor, pero de todos modos estaba bien porque era divertido una vez que el dolor pasaba. Realmente no tenía quejas con el hecho de que era omega, todo estaba bien en términos generales.

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