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Dong llego donde mi madre con todo el equipo en menos de quince minutos después que lo llamé. Debieron haber roto cada ley de tráfico conocida por el hombre, no que algún policía local les fuera a dar multas por exceso de velocidad.

Taehyung y Seokjin tiraron a Dak-Ho dentro de la cápsula. Dong se lo llevaba por ahora. Taehyung dijo secamente que enviaría a alguien a recoger a Dak-Ho, y el tono que él uso me hizo alegrarme de que mi tío no discutiera. Por supuesto, no pensaba que Dong quisiera a Dak-Ho en sus manos por mucho tiempo. La mirada que los hermanos habían intercambiado mientras Dak-Ho estaba siendo tirado dentro de la cápsula estaba llena de historia, Dong miró a otro lado incluso antes que Dak-Ho empezara a maldecirlo.

Me tuvo que dar varias pintas de sangre para reemplazar lo que había perdido. La sangre de Taehyung había curado la mayoría de mis heridas, pero mi pulso había estado peligrosamente débil.

"Eso estuvo cerca," le dije a Taehyung con una temblorosa sonrisa después de mi última transfusión. Estaba sentado en su auto. Él había usado una toalla para limpiar la mayoría de sangre que fuera posible de mí. Nos íbamos antes. Taehyung no quería quedarse más de lo necesario aquí, ya que que no podíamos estar seguros de a quien más Dak-Ho y Calibos le pudieran haber contado acerca de sus planes de emboscada.

Taehyung encontró mis ojos con una mirada inescrutable. "Te hubiera traído de regreso de una forma u otra. Como un vampiro o como un ghoul, incluso si me odiaras por ello después."

"No si Dak-Ho hubiera conseguido lo que se proponía," susurré. "Él me iba a cortar en pedazos."

Taehyung dejó salir un siseó que hizo que los vellos de mi nuca se erizaran. Luego pareció que recobraba su autocontrol.

"Recordaré eso," dijo, cada palabra enfatizada.

Tantas emociones estaban surgiendo en mí. Alivio, pánico retrasado, enojo, regocijo, y la urgencia de agarrar a Taehyung y farfullar acerca de lo encantado que estaba de incluso verlo de nuevo. Pero no había tiempo allí para derretirme, así que obligué a esos sentimientos a retraerse. Vas a estar bien, Jungkook. No puedes convertirte en una masa de porquería psicológica, hay mucho que hacer.

Mi madre estaba en el asiento trasero. Ella se reusaba a ir al complejo, aunque no hubiera estado allí por mucho tiempo. Dong estaba trasladando a todo el mundo. Dak-Ho había encontrado la casa de mi madre, así que era de fácil suponer que él sabía dónde se encontraba el complejo también. Dong no se estaba tomando riesgos de que Dak-Ho le hubiera dicho a otros vampiros donde encontrarlo. La operación de Dong había matado suficientes de ellos como para que algunos consideraran devolverle la visita.

Así que mi madre se estaba yendo conmigo y Taehyung por ahora, y Dong la acomodaría en otro lado después. Una vez él terminara de relocalizar nuestro equipo completo.

"Lo siento, Jungkook," murmuro ella, sin encontrar mis ojos. "No quería llamarte. Me escuché a mi misma diciendo las palabras, pero parecía que no podía parar."

Suspiré. "No es tu culpa. Dak-Ho usó control mental. No podías evitar lo que estabas diciendo."

"Poder demoníaco," susurró ella.

"No," dijo Taehyung firmemente. "Dak-Ho es el que te dijo que todos los vampiros eran demonios, ¿verdad? ¿Crees que él es capaz de decir la verdad, incluso después de esto?"

"Lo que sea que te haya dicho Dak-Ho allá," añadí. "Hubieras sido coaccionada a creerlo, al igual que fuiste coaccionada a llamarme antes. Los vampiros son otra especie, mamá, pero ellos no son demonios. Si lo fueran, ¿por qué sigues viva? Haz tratado de hacer matar a Taehyung dos veces, pero hoy te salvó en vez de dejarte colgada."

Al Final de la Tumba - #3 - KTH + JJKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora