Capítulo seis

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Se encontraba con los dos pequeños en un restaurante de comida rápida

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Se encontraba con los dos pequeños en un restaurante de comida rápida.

-¿Mi mamá sabes que nos tienes aquí?- preguntó la niña con una ceja alzada.

-Puede que cierta parte de la información... no- negó el castaño.

-Esto es un secuestro- acuso nuevamente la niña.

-¿Qué?- preguntó sorprendido Louis.

-Gritare y se lo contaré a la persona que más confianza le tenga- habló él niño recordando palabras de su madre.

-¿Qué? ¡No! ¡Esto no es un secuestro!- Negó él castaño - los conozco desde hace varios años, además Rosa está aquí- Los tres voltearon a ver a la niñera.

La cual se encontraba bailando con los auriculares en una de las esquinas del restaurante.

-Sea... lo que sea que este haciendo- Louis regresó su atención a los pequeños frente a él -Así esta el asunto, ¿qué les parece fingir ser mis hijos por una tarde?- ofreció como si fuera lo más divertido.

-¿Por qué no solo le dices la verdad a ese chico?- preguntó la niña acusándolo.

-¿Cómo sabes?- respondió con una pregunta sorprendido él castaño.

-Mamá nos cuenta todo- le responde Mike encogiéndose de hombros.

-Dice que la confianza es primordial- añade Maddy, su hermana -Por eso... ¿Por qué le mientes a alguien que supuestamente quieres?

-Están muy pequeños para saber tanto...- murmuró él castaño sorprendido, pero algo feliz de la crianza de Harry a los niños.

Aunque debería de ver limitaciones como contarle la vida privada de su jefe a sus hijos. Pero tampoco se excusa con lo que hacía.

-Solo necesito saber si me ayudan- pidió viéndolos a ambos.

-Esta bien- la niña se encoge de hombros.

-¡Si!- festeja feliz Louis.

-Pero antes- interrumpe nuevamente la pequeña -Necesitamos negociar, ¿Qué obtendremos a cambio de fingir ser tus hijos?- le preguntó haciendo un gesto que le recordó a cierto chico de ojos esmeraldas.

Si bueno, no solo en sus gestos si no también en su astucia le heredaron. Puede que no sean tan parecidos físicamente ya que ambos niños se parecen a su padre, pero era evidente que sacaron la personalidad de Harry.

-¿Experiencia?- lo intentó y esta lo vio mal -Mm, ya dilo, ¿Cuánto quieres?- preguntó fastidiado.

-Seiscientos dólares por día, más tiempo extra si se pasan las ocho horas- sería sentencio -Pero yo estaré a cargo de mi maquillaje y peinado, y quiero que pagues un campamento de curso intensivo que mamá no puede pagar.

Un Esposo de Mentiras || L.SDonde viven las historias. Descúbrelo ahora