Capítulo siete

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Se encontraba afuera de J

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Se encontraba afuera de J.D McFunnigan's, esperando a Harry y los niños, pero estos no daban señales de vida.

Hasta que pudo visualizar al vehículo del rizado acercarse hasta donde estaba él para aparcarse a su lado.

-¡¿Qué esperan?!- preguntó exasperado cuando el vehículo estuvo estacionado -¡Ya es tarde! ¿Estás actuando de esposo? ¡Ya esta adentro!- reprochó hasta quedar detrás del vehículo para esperar a que todos salieran.

De este primero bajo Harry, quejándose de dolor por las zapatillas que llevaba, era muy duro conducir con tacones. Llevaba un vestido negro ceñido al cuerpo y unas gafas de sol.

-¿Qué es eso?- preguntó Louis al verlo.

-¿Qué?- respondió desconcertado.

-¿Kylie Janner te vendió eso? ¿Por qué te lo pusiste?- reclama.

-¿Es una broma? ¡Es lo que compraste para mí!- acusa llegando a su lado.

-¡Ya se! Eso ya se, solo pensé... que tal vez es demasiado- divaga.

-¡Gracias eh! ¡Un placer venir ayudarte!- le reclama enojado.

-La primera regla en la improvisación es aceptar siempre la información- inicia Maddy a hablar llegando frente a Harry y Louis junto a su hermano -Sí alguien dice algo, sigan la corriente, no a la negación.

-Claro, claro - dice Louis escuchando atento.

-En mi clase de actuación si alguien dice "No" en escena todos gritamos ¡Muere!- grita Maddy.

-Pues entonces que nadie diga no, no grites eso- pide Louis espantado.

-Antes de entrar calentemos un poco- sugiere la niña.

-No cielo, no vamos a hacer eso- niega Harry.

-La punta de la lengua, dientes, labios, la punta de la lengua, dientes, labios. Paraguerebere Paraguebere- comienza a decir en una sintonía como si estuviera cantando, Harry mueve su mano como si dirigiera una ópera siguiendo a su hija; Y Mike trata de no reírse ante la expresión de enojo de Louis.

-Yo tengo una nueva: ¡Silencio!- dice Louis deteniendo a Maddy.

-Uff- murmura él rizado.

-Ahora hay que entrar ahí- avisa Louis -: ¿Ya estas listo mafioso?- le pregunta a Mike.

-Claro que si- responde serio y con un deje de superioridad.

-¡Hay que hacerlo!- alardea Louis.

Los cuatro se dirigen a la entrada de aquel restaurante, caminando por el estacionamiento los cuatro; Louis, Harry y los niños.

Si los veías de lejos realmente parecían una familia unida que iban a comer y divertirse un rato con sus hijos; Aunque la verdad era completamente distinta.

Un Esposo de Mentiras || L.SDonde viven las historias. Descúbrelo ahora