Las intenciones... No tan ocultas.

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Narrador omnisciente

Enid bajo las escaleras con suma curiosidad por saber quien era esa visita...
Al terminar de bajar vio a un hombre parado en la sala justo frente al ventanal que había, dándole la espalda a dónde ella estaba parada.

Solo podía observar la espalda de aquel hombre y no le parecía sinceramente conocido, pero a sj vez pensó que Wednesday con lo sobreprotectora que se, si no lo conociera jamás lo habría dejado pasar...
Entonces se acercó

E: hola? - pregunto confundida al no saber a quien se dirigía.
Murray: ya no reconoces a tu padre querida? - pregunto divertido...
E:papá!!! - Enid lo abrazo con felicidad.
Que haces aquí? Quieres un café? - ofreció la rubia recordando que es la bebida favorita de su padre
M: se te adelantaron - comenta riendo el padre de la chica mostrándome la taza de café que momentos antes le había entregado la misma Wednesday.
E: es lo que veo - dice riendo la rubia y abraza a su padre.
M: me da gusto verte tan bien hija mía, se nota que estas alegre y nos has dado al nieto más hermoso del mundo! - dijo Murray recordando la cara del pequeño bebé.
W: ahí si te voy a interrumpir suegro, Alarik es cosa de las dos, no solo de la rubia- dijo en tono divertido casi imperceptible excepto para la rubia que la miraba divertida por su intromisión.
E: amor! - respondió Enid y mirando directo a los ojos a Wednesday.
W: mío solé... te ha gustado la sorpresa? Pregunto la más baja mirando directo a donde se encontraba el padre de su esposa.

E: si amor, me ha encantando - responde dando dos pequeños saltitos.
M: me dijo Wednesday que no estas muy feliz con lo de tu hermana, es correcto? - pregunto sin más rodeos el padre de la rubia.
E: no papá, madre me odia, como puede pretender que mi esposa tome también a mi hermana y como si eso no fuera suficiente tengas más cachorros con ella? - pregunto Enid realmente indignada por las acciones de su madre que recordó.
M: hija, ella solo quiere lo mejor para tu familia, quiere que Wednesday a pesar de ser un alfa joven gane respeto y tenga un clan al que proteger y la proteja a ella y a ti mismo - dijo reconociendo el mayor, que lo que decía no era del todo cierto.

W: pero debió preguntarme. - dijo fríamente una Wednesday que no había vuelto a participar de aquella conversación.
E: debieron preguntarnos... pero ustedes siempre hacen las cosas como quieren y como más les funcionan a ustedes - dijo Enid con hartazgo.
M: siento mucho que las cosas sucedieran así... pero vine a darles una alternativa... algo que probablemente podría ser la solución a su problema - dijo con tono feliz pero de secreto el pelicastaño.

Lo que nadie sabía es que tras la puerta de la cocina que colindaba con la sala donde esta conversación se estaba llevando acabo, estaba divina escuchando todo lo que ahí mismo se hablaba.
A ella tampoco nadie le preguntó que quería, o si estaba de acuerdo. Pero su madre es su alfa, le debe obediencia, aunque no le guste lo que le pide.

Perspectiva de Divina

Mi madre ha tomado ya demasiadas decisiones por mi, como si no fuera suficiente hacerme arruinar la felicidad de Enid, quiere que me acueste con su esposa y para cerrar con broche de oro tenga un cachorro con ella.

Mi madre tendrá que disculparme pero no estoy ni de lejos dispuesta a hacerle esto a mi hermana, aunque tampoco puedo negar que Wednesday tiene lo suyo, es una chica bastante atractiva pero sobre todo muy inteligente... tal vez si hablo con ella de las intenciones de los demás clanes y de madre... ella tal vez podría entender, no lo se, tal vez podría lograr que confíen en mi tanto ella como Enid...

Narrador omnisciente

Mientras la platica seguía en pie con el suegro de la ojinegra,  divina seguía escuchando detrás de la puerta...
No lograba comprender como su hermana menor Enid tenía tan poco aprecio por ella, no entendía porque su egoísmo a la posibilidad de que Wednesday también pudiera darle un mejor futuro a ella, porque solo la quería para si misma...?

Matrimonio arreglado... Wenclair OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora