Apocalypse | Punkflower

#01 - Desconfianza

Corrió de manera rápida, su pulso estaba acelerado, corriendo de aquellos zombies que intentaban lastimarlo. Aunque Miguel trataba de detenerlos, estos parecían más rápidos.

El alfa le estaba dando pelea a alrededor de cinco zombies, mientras Peter buscaba algo para defenderse a él y a su pequeña May.

Por más que no quiso voltear a ver a su acompañante, termino agarrando un palo de madera, lo primero que encontró al voltear la mirada al piso.

Volteó un segundo y le tapó la cara a su pequeña Mayday, para que no vea la situación en la que se encontraba O'hara. Se alegraba de la derrota de los zombies, pero le preocupaba el estado del moreno.

Se alarmó mucho más al ver cómo uno de los brazos de O'hara tenía una profunda mordida, era cuestión de segundos para que el más alto perdiera el conocimiento y cayera sobre la fría nieve que los rodeaba. Eso era lo que menos quería en esos momentos.

Tenía suficiente preocupación por dónde quedarían hoy, ya que estaban lejos de su refugio no podría llevarlo tan rápido como hubiera hecho en otra situación. Se golpeó mentalmente por creer que el alfa podría solo contra esos monstruos, hasta alguien como el sabía la fuerza que tenían estos al hacer un mínimo daño en su oponente.

¡Miguel! ¡Cómo se te ocurre hacer eso! ¡Debimos correr! ¡Mira como te dejaron! – El alfa, Peter estaba muy preocupado por el estado del más alto. – Alfa tonto, pudieron matarte.

Aunque el otro no respondía, solo lograba hacer muecas que mostraban el dolor que sentía.

Estaba alarmado, no podía hacer nada, más que cubrir la herida con un pedazo de tela. Perdido en sus pensamientos en que hacer para que no se convirtiera en un zombie y comenzara a atacarle, trató de hacer que se mantuviera despierto.

Estaba tan sumido en sus pensamientos que no notó la presencia de un tercero, quien a la distancia, presenciaba la escena del como atacaría a su presa.

Tal vez podríamos ir a la cabaña, estaremos seguros a–.

Peter no tuvo tiempo de terminar la oración, ya que el moreno lo apartó de manera brusca y antes de poder reclamarle el porqué se encontró con la mirada carmesí de una bestia.

Una bestia de ojos rojos, sediento de sangre.

Las uñas afiladas de ese monstruo rasgaron la piel de Miguel dejando que la sangre comenzara a chorrear. Para su muy mala suerte parecía que este era una bestia y no zombie como la mayoría, lo que le hacía más dificultoso el trabajo de poder vencerlo.

El segundo golpe fue depositado sobre la mejilla de Peter, aunque aprovecho para golpearlo con un palo de madera que yacía sobre la blanca nieve, logrando darle en el punto clave de la cabeza. Logrando su cometido, desmayarlo aunque sea un momento.

Grave error.

El dolor comenzó a hacerse presente, su cuerpo dolía a montones y no podía hacer nada para pararlo,se sentía a morir.

Peter, quien había estado en shock por un momento ,tomó el cuerpo del otro alfa y trato de hacer que despertara, a este punto estaba realmente desesperado.

Otros dos monstruos se acercaban, eran zombies. Volvió a tomar el palo listo para atacar a ambos, por más que se le estaba poniendo la piel de gallina no iba a dejar que lo vencieron fácilmente. Aunque admitiría que esto sería más fácil con la ayuda de Miguel, eso no le impidió ponerse en posición de pelea, listo para comenzar.

Un camión apareció de la mismísima nada, arrollando a ambos zombies.

De ahí, salió un chico, aparentemente joven que se acercó al cuerpo moribundo de Miguel, para luego mirar a Peter, antes de que el anterior mencionado cayera inconsciente.