Una letra es suficiente

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Plan fallido

(Aclaraciones, la imagen no es mía y la saqué de Pinterest, pequeña advertencia; secuencia de pelea mal redactada y que posiblemente saldrá fea)

Le habia tomado bastante tiempo pero finalmente había conseguido desenterrar el cuerpo, había encontrado a un murder dron que extrañamente estaba apagado pero no se veía ningún daño en todo su cuerpo, aquellos seres que hace momentos había creído que eran totalmente invencibles, aquellos que le habían hecho temblar y sentir el más puro miedo, llorar como si fuera una niña pequeña por la impotencia... justo en estos momentos tenía a uno totalmente a su merced, uno que no podía hacerle nada.

Tenía la oportunidad perfecta para estudiar sus debilidades, aquel dron había sido un maldito regalo del cielo (o del autor).

—ha... jajajaja —

Y como si fuera un villano no pudo esconder una risa mientras se regocijaba sobre un cuerpo, con ayuda de eso podría mejorar su arma, no, más que eso, podría  descubrir todas sus debilidades y encontrar una forma de destruir por completo a los murder dron  sin que tuvieran la oportunidad de regenerarse, asesinar a esos robots y los que fueran a enviar para destruir sus vidas.

Tan solo había un problema, tenía que encontrar una forma de meterlo a la colonia, algo tan grande sería muy llamativo pues, las estaturas eran tan diferentes entre ella y el desconocido, y su padre tampoco es que fuera a recibirla con los brazos abiertos si la viera entrar con un murder dron en su espalda.

— mierda, ¿Que hago contigo? —

Debía pensar alguna forma genial de trasladar el cuerpo sin ser atrapada; por un lado, tenía a dos murder drones nada amigables y con enormes deseos de venganza tras ella, por otro lado, tenía a su padre que muy seguro estaría esperando por ella en la puerta y la vería entrar con el murder dron, no estaría contento para nada, todo se sentía tan complicado para la adolescente.

— dahaaaaaaaaaaaa... —

Cada plan parecía genial, pero cuanto más lo pensaba muchos más problemas aparecían, definitivamente todo iría mal, no se iba a salvar limpiamente, no habría problemas en seguir mintiendo si con eso salía de ese enorme problema.

Espero valga la pena llevarte

Al fin tenía el plan perfecto, lo vestiría  con la ropa de algún humano y usaría un gorrito para cubrir los sensores en la cabeza del dron, solo esperaba que todo el mundo creyera esa mentira tan obvia, por ningún lado parecía un worker dron común y corriente.

Pero él no estaba muerto, jamás estuvo en sus planes que N despertará, después de todo, el bello durmiente solo necesitaba algo para despertar, una pequeña e insignificante gota del líquido que necesitaba para vivir

Finalmente su arma había cargado, reunió todo el valor que le quedaba y se llevó al dron amarrado a ella, tenía el cañón en sus manos para defenderse. Un único disparo y la distancia hasta las puertas de la colonia eran lo que la separaban de la muerte, debía dispararles al mismo tiempo y ser veloz, no podía fallar.

Con gran determinación dio el primer paso, iba corriendo mientras arrastraba el cuerpo que tenía amarrado. Todo era tan surrealista, la nieve caía sobre la ciudad y en el horizonte se veía los primeros rayos de sol, el viento hacia que los diminutos copos de nieve flotaran en el aire entre los autos y edificios destruidos, finalmente había llegado la batalla decisiva para Uzi, desde las sombras unos macabros ojos en forma de X la observaban con furia.

— Heje... ¡JAJAJAJAJAJA! —

Era el momento, desde el cielo una murder dron de pelo corto había caído haciendo una grieta en el suelo a pocos centímetros de ella, sus dos alas metálicas se abrían lentamente mientras Uzi se levantaba, el impacto la había mandado volando lejos.

— Glub —

Debía aguantar, la otra dron aún no aparecía y no podía darse el lujo de desperdiciar su único tiro.

— HahaJAJAJAJAJA, no te molestes en pelear, te haré sufrir —

Finalizó la frase y en segundos una lluvia de balas se estampó contra el coche, Uzi a duras penas se había escondido tras el vehículo, aquella murder dron quería no sólo acabar con ella, quería venganza por la humillación que habían pasado hace poco, no sería suficiente con matar a Uzi

Entre risas maniacas se iba acercando sin dejar de disparar, Uzi, actuó rápido y se arrastró por el suelo hacia otro auto, tomando unas piedras para atacar.

No fueron ni siquiera 5 minutos, para cuando la dron asesina llegó Uzi lanzó la piedra con todas sus fuerzas contra su cabeza.

Crash

— ¡ah! —

El golpe fue muy efectivo, toda la pantalla estaba totalmente destrozada, la dron asesina dio golpea a ciegas haciéndole una herida profunda en uno de sus brazos, gotas de aceite caliente y oscuro salieron volando mientras Uzi totalmente adolorida se escondía tras otro auto.

El aceite salía como si fuera sangre, aún siendo robots podían sentir muy en el fondo de su programa, ese dolor era tan horrible e indescriptible, intentaba detener el derrame cubriéndose con su otra mano sin notar las pequeñas gotas de aceite que caían en la boca del dron "muerto".

Su pantalla se encendía, varios mensajes aparecían uno tras otro avisando de algunas fallas, entre ella la función de memoria, unos ojos amarillos veían a nuestra protagonista ante la luz de las últimas estrellas de la noche, ante la luz del crepúsculo matutino que iluminaba el campo de batalla.