Suehiro despertó y lo primero que busco con su mirada fue al albino quien estaba recostado en el sofá y respiraba de manera tranquila, suspiro y se levantó sintiendo un leve mareo que no le daría importancia, bajo para cocinar algo decente para Saigiku y no algo de lo que el solía hacer, paso una media hora cocinando todo lo que le gustaba comer al albino, quería mimarlo y eso estaba claro, se dirigió hacia Saigiku quien estaba dormido, este le tocó suavemente el hombro, despertando al Saigiku diciéndole que la comida estaba lista, por otro lado Saigiku dudaba si comer o no, ya que no se sabía que tipo de cosas le había puesto a la comida.
Suehiro notaba la angustia del albino por lo que un poco desanimado quiso negarse a darle la comida y mandar a comprar una, así que volvió a sentar al albino e ir a la cocina a guardar la comida en el refrigerador, para acto seguido llamar algún tipo de comida y sobre todo la favorita de Saigiku, y así fue como pasaron, en la noche le ofreció la cama a Saigiku para el dormir en el sofá, algo que los llevo a una discusión ya que ninguno queria ceder, pero ahora la situación era más intensa, Suehiro estaba encima de Saigiku mientras devoraba los labios del albino, como si su vida dependiera de ello, y el albino correspondía gustoso ante tal acto.
La ropa estorbaba para ambos, por lo que con desesperación Saigiku comenzó a querer quitarle la.ropa o más bien estaba arrancandole está, para Suehiro le parecía erótico esa parte del albino, que no dudaría seguir así, el tiempo paso así como también la temperatura había subido en ambos, tanto Saigiku como Suehiro estaban desnudos, este último comenzó a masturbar al albino con rapidez y a la misma vez chupaba y mordía su pezón, algo que para Saigiku lo torturaba, Suehiro no era la excepción decidió darle más placer, no es como si fuera la primera vez, ya había hecho suyo a Saigiku o por lo menos eso pensaba el castaño al hacer aquellos roces.
-- Tonto.. apresúrate
Suehiro acercó sus dedos a los finos labios de Saigiku el cual entendió a la perfección y empezó a chuparlos y llenarlos de saliva, sonrojándose en el acto, por qué si hablamos de Jouno tiene un carácter fuerte y que no se muestra débil ante nadie, pero ahí estaba siendo sumiso ante el castaño, sintiéndose como una presa ante su atacante.
Saigiku alejo su boca de los dedos del castaño dándole a entender que ya podía hacerlo, así que procedió a meter un dígito en el anillo de carne del albino haciendo a este gemir de dolor al principio que poco a poco se fue volviendo placer, y así hasta tener tres dedos.
Saigiku gemia ante el placer que sentía y que era proporcionado por el castaño, ya ninguno de los dos aguantaban querían sentirse uno solo, Suehiro saco sus dedos del interior del albino para abrir sus piernas y entrar en el de una sola vez, haciendo gemir de dolor a Saigiku cosa que cambio al sentir las estocadas del castaño, también dejaba mordidas en sus hombros y rasguños en su espalda, para Suehiro era la gloria sentir todo aquello a pesar de ser su primera vez.
Así pasaron horas o por lo menos hasta que Saigiku perdió la consciencia algo que puso en pánico al castaño pensando que había muerto, pero al verlo respirar se calmo, al día siguiente el primero en despertar fue Saigiku, suspiro pesado al recordar todo lo que habían hecho además de ser su primera vez, aún así ninguno de los dijo nada y el tiempo pasaba y el amor que ambos sentían también crecía pero Saigiku era terco no se lo demostraba al castaño.
Los meses pasaron y la operación del albino se acercaba, ambos estaban enojados, razón Jouno le había vuelto a gritar al castaño y ahora sin justificación. Aunque para el castaño dolía que le llamarán de esa forma ya que le recordaba a su infancia.
Teruko llegó y fue directo a golpear a Jouno, ya que este no podía ver, no sabía que el castaño había estado llorando en silencio, con tal de no molestarlo
- Que crees que haces! Tetchō es como un niño, debes de tratarlo bien, puede que no sean pareja pero eso no te da derecho a tratarlo así!
Teruko estaba enojada conoce a Suehiro desde que son niños. Y sabe que su infancia no fue la mejor de todas, no tuvo padres que le dieran cariño.
-- El se lo busca.. tsk... No es como si le afec-
Y ahí Teruko le dió una bofetada y lo transformó en un niño de cinco años este enojado solo se limitó a tomar su ropa con sus manitas.
- Tetchō no tuvo a alguien que lo quisiera en su infancia!
Teruko salió de ahí enojada llegando a dónde el castaño estaba sentado en el suelo en la esquina, su corazón se hizo pequeño al verlo de nuevo así. Ya había sufrido mucho para que alguien más lo haga sufrir.
Comento a Tetchō que Jouno sería un niño por lo menos un día, el asintio y limpio su cara se levantó para ir con Jouno y sin decirle nada, solo lo cargo y lo vistió con ropa que le quedará
-- Tetchō..
- Está bien, ya no importa
De nuevo era cortante y eso hacia que el corazón de Saigiku doliera, ya que el castaño nunca había sido con el de esa manera, hasta el día de ahora
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.Espero amén perdón la inactividad estuve enferma
Continuará...
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Suegiku - Gracias por dejarme amarte
De TodoDos almas que merecen estar unidas, un amor que será para siempre y la felicidad que no será duradera