Sé la luz en mi oscuridad - Jimmy Neutrón x Timmy Turner

Capítulo 05

- ¿Q-qué quieren decir con que no estarán? – Puedo escuchar claramente como su preciada voz se quiebra en tanto su sonrisa risueña tan característica se torna en una forzada - Están bromeando, ¿cierto Wanda? – Siento su mirada colmada de súplica y pánico enfocada hacia mi - Jaja, casi me lo creo – La desesperación se agudiza con cada segundo que transcurre sin que confirmemos que aquella oración no era verdad.

- Cariño... – Mis labios se llenan de valor mientras, con sutileza hablo brindándole una pequeña caricia para llamar su atención - Escuchaste bien, nosotros no estaremos en tu boda -

- ¡NO! – El súbito cambio en su tono y la manera tan brusca de alejarse nos hace estremecer por la sorpresa - ¡No pueden hacerme esto! ¡Esto...! ¡Ustedes...! ¡Ustedes son mi familia! – Puedo notar como cada palabra requiere un gran esfuerzo para ser pronunciada. Su respiración se agiliza mientras se vuelve superficial en un intento por contener el llanto - E-esto es especial para mí... no pueden dejarme solo en este momento – Mi querido ahijado no puede contenerlo más y en un instante, gruesas lagrimas aparecen sobre su bello rostro como un mar de sufrimiento y desesperación.

Esta imagen tan desgarradora de Timmy me deja paralizada, sin ser capaz de reaccionar. Mi mente se nubla ante aquel indomable deseo maternal de consolarlo, de darle lo que quiere al retractarme de las palabras dichas hace tan solo minutos. Sin embargo, no puedo. Si lo hiciera, todo se estropearía y esta única oportunidad brindada por el mismo joven de gorrita rosa desaparecería.

Cosmo por otro lado, actúa. Se aproxima a la masita de llanto que ahora es Timmy para tratar de consolarlo.

- No estarás solo. Tu esposo estará ahí ¿acaso cabeza de pudín no cuenta? – Su mano acaricia el cabello castaño del joven al expresar aquella frase tan locuaz.

- ¿Jimmy? – Con ese susurro levanta su cara de entre sus piernas con una expresión pensativa - ¿Acaso todo esto es por él? – Su cuestionamiento está lleno de reproche e indignación, acompañado de una mirada filosa que aguarda nuestra respuesta. Esta reacción... ¡no puede ser!

- Sí – Sonriente contesta mi amado, ajeno de la situación. Como siempre.

- ¡No! – Me apresuro a corregirlo – ¡No es lo que estás pensando, Timmy! –

- No... no puede ser verdad. Así que esto lo aceleró todo – El de cabellos castaños me ignora, divagando en voz alta dentro su propio mundo mientras desliza sus dedos de modo desesperado entre los largos mechones que caen sobre su frente. Su expresión se torna rápidamente a una llena de pánico y la aflicción - ¡Tengo que evitarlo! – Es lo último que expresa antes de teclear sobre el aparato que Jimmy le había regalado, abriendo un portal y huyendo dentro de éste de manera precipitada.

El ambiente se vuelve gélido y confuso. Esto NO debió terminar así.

- Bueno, está hecho – Cosmo golpea sus manos liberando polvo de ellas, como si hubiéramos hecho un buen trabajo.

- Cosmo, idiota. Nada salió bien – A causa de la angustia, lo sujeto del cuello de la camisa para acercarlo a mi cara – Tenemos que encontrar a Timmy ¡Ahora! O sino hará alguna estupidez de la cuál se arrepienta – Agito un poco a mi querido esposo para ubicarlo en la situación real del momento.

- Tranquiiiila. Sé exaaaactamente a dónde iiiiiiiir – Siendo sacudido aún por mí, logra articular esa frase. Saca su varita y nos hace aparecer en el laboratorio de Jimmy.

Libero por fin al de cabello verde, haciendo que se estrelle contra el suelo con una expresión sonriente pero mareada en su cara.

El ladrido de Goddard alerta al genio sobre nuestra presencia, provocando que detenga el ajuste chispeante de una máquina. Nos dedica una gentil sonrisa junto con una leve venia de su cabeza, todo en forma de saludo.