Siempre tuya (FreenBecky)

En la línea de puntos

"¿Vamos a tener esta discusión en serio?" Pregunta Becky.

"Me gustaría, sí. No nos ocultamos cosas. Nada. Si te pintas las uñas de naranja neón, quiero saberlo".

Becky se sienta en el sofá mientras mira a Freen caminar de un lado a otro. El tema de Saint y Nam definitivamente no necesita ser agregado a la lista de cosas de las que necesitan hablar. Becky sabe que Freen está aquí solo por un tiempo limitado y su tiempo para tomar una decisión, para tomar medidas, está disminuyendo rápidamente. Parece que será una larga noche. La idea de que Nam estuviera en la habitación de hotel de Freen estaba molestando a la rubia y le cuesta mucho pensar en cómo explicarle lo de Saint y por qué nunca se lo conto. No es que no quisiera, sólo se sentía nerviosa por compartir eso con Freen, y cuanto más lo posponía más irrelevante se volvía.

"En primer lugar, nunca usaría esmalte de uñas de neón naranja". Becky sonríe al ver el ceño fruncido en su dirección.

Freen se cruza de brazos arqueando una ceja hacia su futura novia y pone los ojos en blanco. "Es solo un ejemplo. Entonces, ¿por qué no dijiste nada?"

"Tú primero."

"Yo primero nada porque no pasa nada entre Nam y yo. Vino anoche incluso antes de que llamaras y te metieras sigilosamente. De verdad necesito cambiar mi hotel si la gente puede conseguir una llave tan fácilmente"

"Uh, perdón, después de esta semana es mejor que no te quedes en más hoteles. Viviremos juntas".

"No, gracias, no tengo ganas de ser la tercera en discordia "

La boca de Becky se abre en estado de shock y Freen solo levanta sus hombros con los brazos extendidos.

"Eso estuvo fuera de lugar." Dice Becky.

"Es un detalle que necesitaba destacar".

"Freen, voy a dejarlo".

"Entonces hazlo Becky, no me importan los sentimientos de él. Sé que debería amor, lo sé, pero me preocupo por ti. Me preocupo por nosotras. Tú y yo somos más importantes que sus sentimientos".

Becky mira a Freen con una sonrisa, deleitándose con su nuevo mote. Le hace sentir mucho más cálida que Nutria. La fotógrafa frunce el ceño confundida mientras la rubia continúa mirándola de una manera suave.