— Carson, hoy es noche de pizza ¿quieres un poco? — pregunté del otro lado de la puerta, mientras intentaba escuchar algo, pues había estado muy silenciosa la habitación por un buen rato — ¿Carson? — insistió, y en cuestiones de segundos apareció el albino detrás de él.
— ¿Paso algo Liam? — habló sorprendido al pelinegro, quien volteo deprisa y miró sorprendido al contrario.
— Es que... queria saber si quieras... comer pizza — mencionó tratando de mantener la calma, ya que tener a Ivanosky a tan solo unos centímetros, y que este se encontrara en condiciones casi semidesnudas, algo que lo estaba poniendo muy nervioso, dado a que parecía que recién había salido de tomar una ducha.
— Suena bien — expresó extendiendo su mano, y aunque Liam pensaba que el menor se a pondria algo travieso y lo sujetaría de la cintura, la verdad era que solo había hecho eso para agarrar la perilla de la puerta y así poder entrar a su habitación — Ah, pero si tienen piña, prefiero no comer — agregó dejando asomar una sonrisa burlona.
— ¿A quien le gusta de esas? — bromeó intentando seguirle la conversación, siendo contagiado por la sonrisa de Carson, quien -divertido- negó con la cabeza y se adentro a su cuarto, a la vez que secaba su cabello con otra toalla — Les diré a los chicos entonces — avisó apartando la mirada, debido a que Ivanosky volteo a verle con intensidad, ya que parecía que el pelinegro no tenía intenciones de irse sin echar una pequeño vistazo.
. . .
— ¿Cuantos años tienes Carson? — preguntó Simón intentando iniciar una conversacion, ya que habian pasado minutos desde que alguien dijo una palabra, aparte de que el ambiente se estaba poniendo algo incómodo — Es que tengo curiosidad — agregó cuando vio la confusa expresión del albino.
— Pronto cumplire 21 — comentó sorprendiendo a la mayoría, dado a que por su aspecto y su calmada personalidad no creían que el contrario tendría tal edad.
— Wow, no creí que fueras tan joven — opinó Tyler, quien casi se había ahogado con la bebida al escuchar las palabras de su nuevo compañero.
— Al parecer me veo muy viejo ¿verdad? — carcajeo Ivanosky cautivando a todo, puesto que su risa y sonrisa eran muy fascinantes, aparte de encantadoras.
— No... no es eso — balbuceo Liam hipnotizado como el resto, quienes no podían apartar sus ojos de las expresiones atrayentes del menor, el cual mientras más nervioso se ponía más ancha hacia su sonrisa, hasta tal punto en que sus hoyuelos salían a la luz.
¡¿Es que este hombre no podía ser más perfecto?! pensaron todos al ver lo seductor que a veces podía ser Carson Ivanosky, y del fuerte encanto que tenía a su poder, tanto como para tener a todos a sus pies.
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Harem
RandomCuando la invitación a una facultad se le fue dada, no dudo en aceptarla, pero en el momento en que pisó aquella residencia, varios sonidos e imágenes lo recibieron, haciendo que su bienvenida se convertirá en una situación algo diferente de lo que...