Capitulo 4/11 : la ciudad de magma.

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había cosas fáciles que se podían ocultar, tal vez un kraken gigante entre humanos era fácil de ocultar, pero algo que era muy complicado de ocultar eran los sentimientos de chelsea, ya habían pasado unas cuantas semanas desee que se volvieron las mejores amigas marinas y faltaban menos de 3 días para el baile.

la pelirroja sonrojaba a veces viéndola, pensaba en todo lo que la había ayudado este último mes y se ponía como un tomate y para empeorar las cosas su abuela lo notaba y se lo remarcaba cada que se podía.

ella no sabía con exactitud que es lo que aria, pero su corazón se lo decía, su cabeza le rogaba, pero su cuerpo entero tenía miedo al rechazo, simplemente era una indecisión con la que debía de lidiar si quería avanzar.

ruby se sentía de una manera similar a su mejor amiga, pero ella no podía permitirse lidiar con sus sentimientos en ese momento, tenia otros sentimientos con los que debía de tratar primero.

ella esa mañana como de costumbre trato de alistarse lo mas rápido que podía y de esa mamá salir de su casa rápidamente para ir a ver a chelsea, de bajada se encontró a su madre bloqueándole el camino.

ruby trato de pasar simplemente evitándola, pero ella no se apartó de su camino, llegó la hora de la charla que tanto la señora gillman.

ruby: esta bien, que quieres decirme.
agatha: ruby se que tienes muchas preguntas... pero... pero...
ruby: si...
agatha: pero... pero... tu y yo... nosotras...
ruby: tomate tu tiempo.
agatha: yo... no puedo...

durante toda esa conversación ruby estuvo cruzada de brazos y muy distante de su madre emocionalmente, la señora trató de acercarse de decir lo que había en su corazón, pero no era sencillo, el pasado dolía y ella no había sanado.

no puede ser.- ruby estaba enojada, ella había esperado mucho tiempo por respuestas, cuando su madre la llamó para hablar ella pensó que las obtendría, pero al final su madre se acobardó y simplemente balbuceaba.

no puedes ni imaginar lo duro que ha sido todo, trate por mucho tiempo de ser una adolescente normal, una humana, pero no soy eso, por dios ni siquiera tengo huesos, soy un kraken.- ella salió corriendo de su casa, sin desayunar o decir algo mas, ahora mismo ella estaba tan molesta que echaba humo.

a agatha le empezaron a salir lágrimas, viendo como su hija se iba, brill en ese momento salió de su habitación y se encontró a su hermana arrodillada en el piso el fue rápidamente a abrazarla y consolarla.

agatha: es oficial... mi peor pesadilla se hizo realidad.
agatha: mi hija me odia... tanto como yo odio... a mi madre.
brill: no digas eso... pronto todo se solucionará.
brill: vamos a desayunar cuando vuelva todo será mejor.
agatha: bueno... me ayudarás a limpiar los platos.
brill: ehhh.

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no puedo creer, los libros están tan equivocados.- ruby estaba emocionada hablando de criaturas marinas y paisajes nunca antes vistos mientras ella y chelsea estaban recostadas en las arenas debajo del mar.

la kraken hablaba con mucha fascinación, la sirena simplemente podía verla aguantando sus suspiros.- lo siento si hablo demasiado, debes creer que soy una nerd.

no, para nada.- dijo sarcásticamente a lo que ambas procedieron a reírse, chelsea de hecho le pidió que siguiera contando información, la sonrisa que ponía ruby cuando estaba feliz era un rayo de sol para ella.

chelsea: no puedo creer que tu madre te ocultara esto.
chelsea: este es un mundo genial.
ruby: yo tan poco puedo, si tan solo hubiera una forma.
ruby: tu porque vives en tierra.
chelsea: de hecho esa es una buena pregunta.
ruby: tu abuela no te lo a dicho y tus padres.
chelsea: yo no conocí a mis padres.
ruby: ohh... lo lamento...
chelsea: esta bien... siempre hemos sido mi abuela y yo...

reinas de los mares (chelby)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora