Grande ; KOOKTAE

Jungkook

Voy de un lado a otro frente a la cama en la oficina de la enfermera, viendo como la mujer ilumina los ojos de Taehyung con un bolígrafo para determinar si tiene una conmoción cerebral.

Soy un cruce entre enfermo del estómago y lívido más allá de las palabras.

Carreras. Estaban corriendo cerca de mi Taehyung.

Si lo hubieran golpeado...

Un grito se aloja en mi garganta y aprieto un puño contra mis labios, evitando que se escape. Ya he revelado demasiado sobre cómo me siento hoy. Necesito calmarme. Dejar de caminar por la oficina como un animal enjaulado, mis manos listas para arrancar los barrotes si algo grave le pasa. Si me hubiera detenido a hablar con él en el pasillo, no habría estado en el estacionamiento en el momento equivocado. Esto es mi culpa. No quería que sus amigas se rieran de él por hablar conmigo, pero no sabía que la alternativa era que casi lo atropellaran. Maldita sea.

¿Por qué tarda tanto la enfermera?

- ¿Es una conmoción cerebral? - Pregunto, incapaz de soportar el suspenso por más tiempo. Si tiene una lesión en la cabeza, lo llevaré al hospital inmediatamente.

La enfermera me mira con especulaciones. - No. No hay conmoción cerebral. - Su sonrisa es muy grande cuando está de pie. - Vamos a limpiar y vendar esa rodilla, luego puedes sentarte aquí un rato y descansar, ¿de acuerdo?

- Eso suena perfecto, gracias - murmura Taehyung.

Intento no mirar por encima del hombro de la enfermera mientras limpia la rodilla de Taehyung, pero no puedo evitarlo. Me estremezco cada vez que Taehyung lo hace, una vena golpeando en mí frente al ver los pedazos de grava incrustados en su hermosa piel. Dios, debería haber matado a esos imbeciles por lo que hicieron.

¿Y si hubiera corrido al estacionamiento y visto a Taehyung quieto en el medio del carril? Ni siquiera creo que estaría aquí ahora mismo. Creo que inmediatamente habría dejado la tierra, incapaz de soportar un segundo sin él vivo.

- Bien, ya está todo listo - dice la enfermera. - Mantén la bolsa de hielo durante quince minutos, luego te enviaré de vuelta a clase. - La mujer mayor me mira de reojo. - ¿Asumo que vas a hacer guardia con él?

Gruño.

Asiente una vez.

La enfermera se va, corriendo la cortina detrás de ella, y Taehyung me sonríe desde su posición, su pelo rubio se abrió en abanico a su alrededor.

- ¿Le enviarás un mensaje de texto a Heejin y le dirás que estoy bien? - Se lame los labios casi nerviosamente. -Quie-quiero decir que ya se habrá enterado de que tú... has venido a buscarme. Pero por si acaso.

- Claro - digo, sacando mi teléfono y disparando un mensaje a mi hermana.

"Tengo a Taehyung".

En otras palabras, él está bien. Está a salvo. Y no dejaré que sea de otra manera.

- ¿Cómo te sientes? - Pregunto, guardando mi teléfono y arrodillándome al lado de la cama.

- Bien. - ¿Está mirando mi boca o es mi imaginación? - Gracias por venir a buscarme.

Su gratitud hace que me ardan las puntas de las orejas - Por supuesto que sí.

Unos segundos pasan.- ¿ Jungkook ?

-Mmm.

- ¿Por qué siempre vienes a rescatarme?

Esta conversación se está desviando hacia un territorio peligroso. La respuesta es, porque te amo. Siempre te he amado. Pero esta relación física entre nosotros es tan nueva. Me pediste que te ayudara a explorar tus impulsos sexuales con seguridad. Por lo que sé, eso es todo lo que quieres. Fin de la historia. Eso es lo que tiene sentido considerando lo diferentes que somos. Es perfecto, yo un bárbaro descuidado. Si le digo la verdad sobre mis sentimientos, podría aterrorizarlo. Perder lo que tenemos, aunque sea solo temporalmente.