El Espejo Maldito [Vol.1]

19

— Gran jefe — llamo al pelinegro — me acaban de avisar que el señor Jungsuk acaba de llegar y pide por su presencia— informó, deteniendo la tarea de Jungkook,había despellejado a los cinco hombres que estaban ahí,los había castrado,sacado los ojos,cortado la lengua,quitado las uñas,cortado los dedos y otras par de cosas.

— Quiero que juntes algunas partes que descuartize y cortes otras,me las pones en una bolsa negra,tengo que llevarle la cena a mi cachorro — Jeon a paso apurado,cubierto de sangre y con el cabello despeinado,salió del cuarto.

El hombre asintió ante lo pedido comenzando con su trabajo,pues el pobre hombre pensaba que estás porquerías se las daría de comer a los ocho Doberman's que su jefe tenía.

Los pasos de Jungkook resonaban por las paredes del lugar,todo aquel que se cruzaba con él hombre daba una profunda reverencia y sus saludos. Jungkook no tenía tiempo para contestar.

Llegó a las puertas dobles del despacho que tenía en la base,encontrando a los dos hombres sentados en su sofá.

Tesio Solon y Jeon Jungsuk.

A Jungkook le hervía la sangre al ver al viejo,sentía asco por qué su nombre era casi idéntico al del vejete. Apretó fuertemente los dientes,puso un rostro neutro,guardo compostura. Camino como todo un rey,como todo un tirano hasta su silla de cuero,ubicada detrás de la mesa de cristal.

Cruzando una pierna encima de la otra, entrelazando sus propias manos frente a su rostro,observando con detalles,cautela y con la guardia arriba a ambos hombres,ambos Jeon's,con rostro privado de emociones,retandose con la mirada.

Mientras tanto Tesio,se encontraba nervioso y sudando frío,jamás pensó que el nieto de Jungsuk fuera tan intimidante y aterrador. No puede evitar imaginarse que cosas pudo haberle echo a Medea.

Quería gritar,pero se aguanto las ganas al ver que el joven lo miraba de reojo,asesinandolo con la mirada,enterrando lo vivo.

Jungkook decidió hablar por fin:

— ¿Se puede saber, qué mierdas hacen aquí?,parte vejetes— su voz saliendo más gruesa de lo normal,mandando escalofríos a las columnas de ambos hombres.

Jungsuk solo sonrió de lado, obsevando con detalle a su nieto,mientras que Tesio, explotó.

— ¡No te hagas imbécil!,¡maldito hijo de perra,tú más que nadie sabe que tienes a mi hija!¡Torturandola tratándola peor que aún animal!¡Desgraciado,es tu prometida! — se escuchó un silbido,una bala había pasado por el costado derecho de la cabeza de Tesio.

Y,adivinen quién mandó la bala.

Así es. Jungkook sostenía firmemente una pistola de la que salía humo por la boquilla,ni siquiera se molestó en levantarse de su silla de cuero.

Se deleitaba de como Tesio temblaba mas que una hoja,con cara de horror y las risas de Jungsuk no ayudaba en nada a la estabilidad del hombre.

Mismo que miraba los ojos de abismo de Jungkook,aquellos ojos qué sentía que se lo tragaban vivo,torturandolo,jodiendo.

— ¿Asi que vienes por tu hija,después de haberla mandado a mi,sabiendo que podría verle metido un tiro en cuanto irrumpió en la junta que tenía? — pregunto con sorna,torciendo el gesto,sus ojos reflejando odio — acaso...¿Creiste que por traer al viejo iba a soltarla?¿A dejarla en libertad?,de verdad que estás muy mal de la cabeza al creer eso.

Se rió con gracia fingida, logrando que a Tesio casi le de un paro cardíaco por el miedo.

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