Sábado
Hoy iría a casa de la amiga de mi madre y por algún motivo estaba nerviosa .
Me abrumaba la idea de tener que comer y hablar con unos desconocidos.
Desde que estoy en España me he vuelto más tímida e introvertida.
Estar aquí y volver a conocer gente, buscar amigos y todo eso es nuevo para mí . Tengo que comenzar desde cero y crear lo que ya tenía en Milán.
Estos pensamientos me inundaban mientras tomaba mi té mañanero .
Nunca he sido mucho de infusiones pero estaba intentando cambiar hábitos y comenzar desde cero en todos los aspectos de mi vida.
Estoy intentando convertirme en la mejor versión de mi misma.
Cogí el teléfono y miré la hora .
Eran las 10:18 a.m.
Me llevé la taza a la boca y de un trago me bebí lo que quedaba de té.
Con un poco de prisa recogí la taza y la dejé en el lavaplatos para dirigirme a mi cuarto y vestirme.
Cerré la puerta y saqué un par de conjuntos para ver cuál ponerme .
El primero eran unos vaqueros cortos negros un poco deshilachados y un top básico rojo que sinceramente me quedaba de fábula .
Debajo me pondría unas vans negras y los accesorios los vería más tarde .
La siguiente opción era un poco más arreglada.
Se trataba de un vestido largo blanco ajustado que me llegaba hasta las rodillas y que me hacía lucir una figura alucinante. Seguramente lo acompañaría de unas sandalias blancas o quizá de unas esparteñas.
Y por último pensé en una faldita floreada granate bastante mona junto a un top blanco de un solo tirante. Probablemente con sandalias también o quizá unas vans para darle un toque más informal al conjunto.
-Pufff, no tengo ni idea de cuál ponerme- pensé.
Abrí la puerta y mediante gritos le pregunté a mi madre.
-¡Mamá, ¿Te vas a arreglar?!- grité desde mi habitación
-¡Más o menos!. ¡¿Por?!- me respondió desde el salón.
-¡Esque no sé qué ponerme!.
-¡Es en una casa pero yo me pondría mona para dar buena impresión. Recuerda que es la primera vez que vamos a una casa ajena desde que estamos aquí!- soltó finalmente.
-¡Vale. Creo que ya se que ponerme!.- le respondí - ¡Gracias mamá!- le agradecí.
-¡De nada!
Quería dar buena impresión, sentirme cómoda y guapa asique guardé los otros conjuntos y dejé el vestido encima de la cama.
Me puse un leggins corto gris y un top deportivo rosita junto a mis deportivas.
Me hice una coleta y bajé las escaleras.
Le coloque la correa rosita a Bob para que fuera a juego conmigo y cogí una botella de agua junto con un recipiente plegable de silicona para que Bob también pudiera beber agua.
Por último agarré las llaves, miré la hora , las 10:45 , y cerré la puerta.
Bob y yo bajemos las escaleras del porche y empecemos a calentar un poco para correr.
Cuando terminé de calentar me puse mis auriculares y reproducí mi playlist favorita.
Mientras corria no podía pensar en mis problemas.
Correr definitivamente me ayudaba a sentirme mejor y evitaba que pudiera rallarme .
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Dame tu promesa
Teen Fiction[Contenido +18] Lea es una joven de 16 años que tras la perdida de su padre tiene que mudarse a otro país. Allí conoce a dos chicos completamente diferentes de los cuales se enamora. ¿Con cual decidirá quedarse? ¿Tomará la decisión correcta?
