Dame tu promesa

Capítulo 4

Por fin nos sentamos en la mesa.

La verdad esque estaba bastante hambrienta ya que solo llevaba un té y dos vasos de agua en el cuerpo.

A mí derecha se encontraba Lucía y a mi izquierda, mi madre.
Al lado de mi madre estaba Isa y a su lado, su marido.

Lucía y yo comenzamos a charlar sobre mi llegada a España e incluso también hablamos de Italia .

Me dijo que tenía muchas ganas de ir y de probar nuestra gastronomía.

Yo le prometí que si algún día iba me la llevaría conmigo.

-¡No sabes la ilusión que me haría!- dijo entusiasmada- Realmente espero que vayamos pronto.

Me puse a pensar en Italia y la verdad esque ya tenía ganas de volver de nuevo a pesar de llevar tan solo un poco más de un mes aquí.

-¡Si, y yo también!- le respondí ilusionada.

Comenzamos a comer y para mí sorpresa la ensalada de pasta estaba riquísima.
Nunca pensé que la pasta preparada de esa forma me gustaría, la verdad.

Lucía y yo seguimos hablando el resto de la comida .
La verdad esque conectamos muy rápido.

Tenía un sentido del humor particular y que en lo personal me encantaba.

Había dejado a Bob corretear libremente por la casa ya que así me había dicho Isa que lo hiciera ,pero para sorpresa de todos el Border Collie de la familia consiguió escaparse de donde sea que estaba y comenzó a corretear detrás de mi pequeño perro.

Pensábamos que este devoraría a Bob, pero al contrario, comenzaron a jugar alrededor de la mesa provocando que está se moviera y por consecuencia callera un vaso.

De ese modo todo el líquido de su interior fue vertido sobre la mesa y para mí desgracia, sobre mi vestido.

Por si fuera poco se trataba de vino asique no sería especialmente sencillo de quitar.

Todos se quedaron impactados al ver cómo mi precioso vestido pasaba de ser completamente blanco a tener una gigantesca mancha granate.

Juan , el marido de Isa, se levantó de inmediato y saco a los perros de él comedor.

Isa rápidamente me dió una servilleta pero esto no sirvió mucho de ayuda.

-Esto pinta mal- dije todavía impactada

-Deberias ir al baño e intentar limpiarlo con algo de agua- añadió mi madre.

-Si quieres ve al baño e intenta quitarlo y si no sale o te sientes incómoda ,te lo quitas y Lucía te deja algo mientras lo lavo- dijo la amiga de mi madre .

-Claro, yo te dejo algo sin problema.- respondió Lucía mientras me dedicaba una media sonrisa.

Yo acepté y fui al baño que se encontraba en la planta de arriba.

Entré al cuarto de baño y cerré la puerta.

Me quité el vestido y lo intenté lavar por la parte donde se encontraba la mancha

Está parecía desaparecer un poco pero seguía siendo visible.

Alguien abrió la puerta del baño y pensé que sería Lucía o Isa para comprobar cómo estaba la mancha, pero para mí sorpresa un chico alto de ojos verdes y pelo castaño no muy oscuro fue quien lo hizo.

Inmediatamente cogí una toalla que había por ahí y cubrí mi cuerpo casi desnudo.

Nos quedamos mirándonos algo confusos.