Love On The Floor || NCT Fanfic

Capítulo 14: Haechan

Taeil era hermoso. Es lo que podía comprobar todos los días, no sólo al observar su rostro con detenimiento, y recorrer con un dedo sus cejas pobladas, lo hacía también cuando lo acompañaba al trabajo, y su novio siempre se ocupaba en ayudar a todos y ser lo más contribuyente posible. Le abría la puerta a clientes, asistía a pasantes y compañeros nuevos en la firma y saludaba con una sonrisa a cada uno de los trabajadores del lugar. Brillaba tanto con su amabilidad y trató fácil.

Lo podía comprobar cuando cantaba por las noches, mientras se lavaba el rostro. Su voz era tan meliflua y relucía en cada melodía. Sabía que debía enfocarse en los arreglos de mesa y obsequios que preparaban para la boda de Taeyong y Doyoung, pero en un impulso tiró la Rosa Blanca de papel que cargaba en la mesa y se acercó a abrazar a Taeil, ocultando su rostro en su pecho, sintiendo suaves caricias en su cabello, porque a su novio le gustaba corresponder siempre los abrazos dulces.

— Juro que no sé qué hechizo colocaste sobre Taeil, Haechan. — Dijo Taeyong desde el otro lado de la habitación, sonriendo incrédulo. — Nunca lo había visto así.

Taeil río un poco, Haechan apartó su rostro solo unos momentos para verlo a los ojos.

— ¿Oíste eso? Te lancé un hechizo.

— Seguro que lo hiciste.

Estuvieron algunos minutos así, hasta que suspirando regresaron a su labor, sentados en el sofá de la casa de su jefe. La mayoría de miembros de NCT llegaron a ayudar a Taeyong a realizar los centros de mesa, rellenar pequeñas cajas con golosinas y pegar rosas de papel níveas sobre ellas. Además de eso organizaban abre botellas y llaveros con la conmemoración grabada en el metal. Habían llevado en la tarea aproximadamente 3 horas, y aún faltaba más trabajo para finalmente tomar un descanso y almorzar.

— ¿Por qué no le pagaste a alguien para que también hiciera los arreglos de mesa, jefe? — Chilló Haechan con un tono quejumbroso, aunque todos sabían muy bien que él estaba contento de poder ayudar con los arreglos de la boda, ya que faltaba tan poco.

— ¿Crees que podemos pagar un viaje a Hawai, horas extra para los empleados y además, a alguien que realice los arreglos de mesa? — Ahora fue el turno de Taeyong de exagerar con su tono, ya que movía las manos como una diva, ya había realizado varios berrinches desde el inicio de la Organización del evento. — ¡No somos millonarios!

— ¿Quién los manda a casarse hasta Hawái? Bien podría ser en una Villita en Taiwán.

— Ah, ojalá pudiera ser aquí. — Dijo Ten, suspirando soñador, con tela de los arreglos entre sus manos. — Ni siquiera en mi país es legal.

— Sé optimista, puede que pronto será, así podrás llevar a Kun a Tailandia a conocer a tú familia, y pedirle matrimonio de una vez por todas. — Dijo Jaehyun con ternura.

— Solo llevamos un año juntos.

—He visto cómo lo ves. — Ahora fue el turno de Mark el agregar cosas a la conversación. — En tú fiesta sorpresa de cumpleaños, fue así: "Ku-Kun gra-gra-gracias". — Imitó el jóven con humor tartamudeando las palabras, Ten le lanzó una de las almohadas del sillón al rostro, entre risas.

— De todos modos Taeyong se tardó mucho. Estuvieron casi siete años juntos hasta que le pidió matrimonio a Doyoung. — Johnny recorría la mesa, buscando algunos bombones que colocar en su caja, él era el único junto a Mark e Irene que conocía el romance de los prometidos desde el principio.

— Si te soy honesto, se siente como si ya estuviéramos casados.

— Claro, hasta comparten sus pares de crocs. — Irene tenía una mueca divertida en el rostro. — Pelean por el control remoto de la tele y hacen competencias de eructos.