-According to the Plan.

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QSMP: Diez minutos para el ensayo de la boda de Wilbur Soot.

Cuando el castaño leyó el mensaje en el chat, su semblante pasó de estar relajado a tensarse por completo.

Había estado escribiendo canciones y tocando un poco la guitarra, por lo que se olvidó por completo de el ensayo de su propia boda.

Ni siquiera le emocionaba.

Para él, una boda se llevaba acabo gracias a que ambas partes se aman. Era una promesa de amor. No por interés.

Bajó con rapidez las escaleras de su casa, encontrándose con su padre, Philza.

El de grandes alas negras lo miró de reojo, tomando aire para hablar: —Llegaremos tarde.–Mencionó con delicadeza, mientras abría la puerta de la casa. Una carroza aparentemente demasiado vieja como para aún existir y un chófer que no podía parar de toser esperaban fuera.

El de lentes solo se limitó a seguirlo, subiendo a la carroza después de él.

Luego de acomodarse, el chico habló: —¿Él no debería casarse con alguien más? Jamás he hablado con él, ni siquiera lo conozco.

La carroza comenzó a avanzar, Wil bajó la mirada hacia el suelo con sorpresa.

"Aún se puede mover" pensó.

—Ya hemos hablado de esto infinidad de veces, Wilbur. Casarte con él puede ser de ayuda para nosotros.–Explicó el hibrido de cuervo con aburrimiento.

A el chico no le gustaba eso. Quería casarse por amor y no por compromiso.

—Señor Soot, otra vez

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—Señor Soot, otra vez. Desde el principio.–Pidió el angel, el cuál, la estaba haciendo de el sacerdote. En su voz se escuchaba que estaba harto de la situación.

Había pasado ya tres horas desde que había comenzando el ensayo en la casa que habían mandado a construir en la isla de el chico con el que el de lentes debía casarse. Wil no podía terminar de decir los votos matrimoniales sin olvidarlos.

—"Con esta mano, yo sostendre tus anhelos. Tu copa nunca estará vacía, porque yo seré tu vino...".–Repetía el angel lentamente–."Con esta vela, alumbrare tu camino. Con este anillo, te pido que seas mío." Ahora, hágalo usted.

El de rulos tomó la vela, acercandola a otra encendida para prenderla.

—Con esta vela..–Exclamó el chico mientras juntaba ambas mechas de las velas. Luego de varios intentos, la vela apagada no encendió.

Y cuando la vela por fin estaba encendida, la apagó con un suspiro.

Todos los presentes estaban hartos, en unísono le ordenaron a Wilbur proseguir con los votos.

Se escuchó el timbre de la casa, así que el dueño le ordenó al mayordomo que fuera a abrir.

Cuando el mayordomo volvió, le entregó un pequeño papel al hombre.

—Es un tal Cucurucho, señor.–Mencionó en un susurro.

El hibrido de oso polar entró a la sala, acercándose al hombre.

—Buenos días, soy malo recordando fechas, al parecer me adelanté un día a la ceremonia.–Explicó con sencillez.

El hombre y su esposa se voltearon a ver, preguntándose si era familiar de alguno de los dos.

Al darse cuenta de que no, ordenaron una silla para el recién llegado.

—Por favor, continúen.–Pidió Cucurucho.

Entonces, Wilbur tomó aire nuevamente y levantó la mano equivocada, mientras sostenía la vela.

I'll Be Your Wine ; TNTduo AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora