Me Olvide de Vivir

No perdonó

Sara Leagan estaba cayendo poco a poco en un abismo sin fin.... Sus recuerdos y sus impulsos la hacían no tocar fondo, recordó cuando perdió a su mamá y lo que sufrió al quedar sin ella, a un que quien la cuidaba eran sus niñeras, era tan solo una niña de cuatro años y por otros cuatro, tubo a su papá solo para ella, hasta que se comprometió con una dama de la más alta sociedad Escocesa y descendiente directo de uno de los principales clanes de Escocia, mi padre como todo rico deseaba tener nuevas riquezas y títulos nobiliario, mientras yo me consumía de los celos, si pero obtuve poder y mucho al hacerme parte de ese clan, claro que tampoco quería tener hermanos, así que a muy pequeña edad logré hacer que mi nana consiguiera medicinas para que Elroy nunca saliera embarazada y lo logré, no compartir nunca el cariño de ella, y conseguí que me tratara como su propia hija, fui hija única y todo lo que había era mío y mío seguirá siendo, quiero que mi Eliza sea la siguiente señora Ardlay, necesito tener poder..... Se decía en sus adentros Sara, mientras su cuerpo se ponía más putrefacto, no había arrepentimiento y su alma se condenada, su padre se acercó a ella y le dijo—Hija, querida hija, porfavor arrepiente de todo el mal que has hecho, tus hermanos no natos ya te perdonaron y viven felices en el reino de los cielos, hija, yo sufrí muchos tormentos para poder estar en la compañía de tus hermanos, todo por haber sido avaro,  orgulloso, mentiroso y   ser corrupto..... Hija dentro de todo tienes una oportunidad más, a un puedes arrepentirte, se cada cosa que has hecho para mantener incluso a Reymond con Tigo, se de cada intriga que has tenido para obtener todo lo que deseas, se también que ahorita te han tenido que dar eter, porque tú cuerpo se está pudriendo y convulsiona de dolor, si hija, es putrefacto y lo peor es que Eliza está por tu mismo camino, aprovecha la nueva oportunidad que tienes y arrepiente.....—No, puedo padre, no puedo arrepentirme por lo que hecho, pues por eso es que ahora tengo la posición que merezco y merezco una más grande..... El olor del cuerpo de Sara era a un peor y de las mujeres que le acompañaban estaba pasando lo mismo, a excepción de Elroy que mejoraba, Anie estaba entre la vida y la muerte pues a un no sabía que hacer o que sentir, tenía una enorme lucha interna; mientras sus familiares llegaban rogándole al Dr. Salvará sus vidas, Niel lloraba por su madre y hermana, rezaba, por primera vez  para que se salvarán, sin embargo está no llegaría ni en ese momento, ni de la manera que el creía, pues la putrefacción de sus cuerpos era tan grande que pronto exsalaron su último suspiro.— el olor era terrible y el médico no daba posibilidades de sobrevivir, de las cinco mujeres, probablemente solo había una que sobrevivir, máximo dos, pero las otras tres se encontraban, ya en otras tierras, en otra vida.... Sin embargo la familia había llegado, en cuanto las vieron iniciaron a realizar los trámites para llevarlos de las casas en las que se encontraban alojadas, sin embargo en sus corazones sabían que no resistirán mucho tiempo más, tanto Raimond, como Niel Leagan estaban sumidos en una profunda pena por su madre y su hermana, sin embargo ellos no podían hacer nada, se las llevaron pero no sobrevivieron poco a poco sus respiraciones se iban pausando y ya solo un milagro las podría salvar.....

Mientras Elroy abría los ojos poco a poco con un semblante mucho más calmado, solo deseaba hacer una cosa suplicar el perdón de Candy y de su sobrino, si la antes orgullosa Elroy había duplicado hablar con ella, solo que no harían las cosas con más cuidado por el estado de embarazo de Candy y ella ahora cuidaría de ella y de la nueva generación Ardlay, si ahora todo cambiaría, pues el corazón de Elroy había sábado y estaba cicatrizando sus heridas, a la vez cicatrizaba las heridas del cuerpo, era una mujer nueva renovada, lista para dar y recibir amor.....

Los padres de Candy estaban felices al notar como todo se iba solucionando con su hija y orgullosos por unirse a un clan tan importante como el Ardlay, pero sobre todo orgullosos de su pequeña que al fin estaba encontrando la felicidad....

Terry, se acercó a Albert para solicitar su permiso para poder visitar a su pequeño, su corazón estaba sanando y abriendo las puertas para una nueva relación, una que sería duradera, si el amor todo lo puede, todo lo soporta, todo lo perdona, todo lo resuelve, y en esta historia es la mejor manera de crear un lazo con uno mismo, con Dios, con la familia y amigos. Cuando no perdonamos no somos capaces de hacer la voluntad de Dios y ese Dios es el que nos mueve y llena de amor.— Eran los pensamiento de Candy, al tocarse su muy abultado vientre.

Un día estaba realizando la caminata matutina con una sana Elroy y de repente.........

Continuará.