Chapter Forty

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August 21, 1988. Sheffield, England

Luego de varios minutos de viaje, pude sentir como alguien me tocaba levemente el brazo, era la señora que había visto a un principio leyendo, muy amablemente me aviso que ya habíamos llegado, agradecí a la señora por el gesto y salí del autobús en busca de mí maleta.

Una vez con todo en mano, me dirigí a la casa de mis abuelos donde allí iba a dejar mí equipaje para poder ir al hospital.

Llegué al hospital y las condiciones eran peores de lo que me imaginaba...

-Hola, que tal, busco la habitación del señor Arthur Williams- le hable a la enfermera que estaba detrás del escritorio-

-Usted es...?- pregunto la chica morena.

-La nieta, Lily Williams- conteste algo impaciente.

-Venga conmigo señorita Williams- ordenó la enfermera y la seguí por los largos pasillos hasta llegar a una habitación con el número 16 en él, la enfermera abrió la habitación y visualice a mí abuelo acostado, lleno de heridas y un tubo por el cual respiraba, mis ojos se llenaron de lágrimas, levemente me acerque a él y tome su mano

-Los dejaré solo- hablo dulcemente la enfermera y se fue dejándonos solos a mí abuelo y a mí.

-Hey abuelo, recuerdas el día que me enseñaste sobre el Jazz, bueno nunca he dejado de escucharlo, es un género muy peculiar y bonito, transmite tanta paz, así como tu lo haces. Eres el padre que apenas tuve, ocupaste el roll el mismo día que nos enteramos que había fallecido, y ahora tu estás mal y no hay nada que yo pueda hacer para salvarte y eso me duele el doble, nunca me va a alcanzar la vida para agradecerte todo lo que has hecho por mí, y por más que duela, la vida es así, tarde o temprano perdemos a quienes más amamos.- No sabía si él podía escucharme o no, tampoco sabía su parte médico pero se lo veía mal, el simple hecho de que no pudiera respirar por su solo ya me estaba diciendo más que mil palabras.

-Señorita Williams, verdad?- Oí a alguien a mis espaldas, limpie mis lágrimas y gire levemente mis cabeza, observé a un doctor de unos 40 años aproximadamente. Este se presentó con el nombre de "Doctor Smiths" vino a explicarme la situación de mí abuelo, el cerebro había sufrido un golpe muy fuerte y eso hizo que lo llevara a una muerte cerebral, por más que él siguiera en coma nunca despertaría.

-Entonces supongo que habrá que desconectarlo, aunque debo hablar con mí abuela antes de eso- agregué entre llorosos cuando el doctor terminó de hablar.

-Respecto con su abuela señorita Williams, lamento decirle que ella ha sufrido un infarto- Me quedé en blanco por unos segundos mirando a la nada misma hasta que reaccione nuevamente cuando el doctor Smith continuo hablando. -Le dimos el informe sobre el señor Williams y no resistió, ella estaba en observación de los enfermos porque le habíamos registrado mareos, presión baja y otros síntomas desde que ha llegado aquí a buscar a su marido.

-Y dónde está ella, cómo se encuentra?- pregunté angustiada ante la noticia, el doctor empezó a acercase lentamente a mí antes que comenzar a hablar.

-Lamento informarle que el corazón de su abuela no ha resistido-  Sentí una punzada en mí pecho, quería llorar y desbornornarme ahí mismo, pero debería mantener la postura lo más que pudiera. Aguante mis lágrimas y le pedí encarecidamente al doctor que me llevará con mí abuela, me dejaron unos minutos sola para que pudiera despedirme de ella, su cuerpo estaba tibio y mis lágrimas no tardaron en salir, el momento de despedirse había llegado.

Think About You (Izzy Stradlin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora