Eres hermosa- Elizabeth Olsen

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Pov Lizzie

Me casé con T/N hace dos años aunque ya llevamos cinco de relación y hace cinco meses tuve a mis gemelos. El parto fue algo complicado y casi pierdo la vida, pero al final todo salió bien. Mi cuerpo cambió mucho y eso mi madre me dijo que iba a pasar, me siento gorda y menos atractiva que antes, todo me queda apretado y ya ni si quiera puedo volver a utilizar la ropa que usaba antes de caer embarazada. Caí en una depresión post- parto y necesité mucha ayuda tanto de mi esposa como de mi psicóloga.

Si hablamos de mi esposa, ella los dos primeros meses se la pasaba con los bebés y conmigo, de hecho ella me ayudó mucho cuando yo estaba muy mal después del parto y se ocupaba de los niños para que yo pudiera tomar siestas y descansar. Pero después solo trabajaba, desde los niños no tuvimos sexo y ni si quiera me tocaba lo que me hacía dudar más de mi cuerpo y de cómo me veía. Dinero es lo que menos nos hacía falta incluso si yo había parado por un tiempo la actuación, pero ella siempre se va temprano en la mañana y vuelve tarde en la noche.

Hoy era uno de esos días en los que hubiera querido que ella estuviera conmigo, había logrado hacer dormir a los niños luego de haberlos amamantado y como siempre antes de entrar a la ducha me miré al espejo y vi mi cuerpo destrozado, tenía tantas estrías y estaba tan gorda incluso si casi ni comía. Entré a la ducha finalmente y me di un baño mientras lloraba, sintiéndome de repente tan sola.

Me coloqué mi pijama y me fui abajo, esperando a que llegara t/n, dieron las ocho de noche y la puerta se abrió, al girarse se asustó al verme y sonrió.

— me asustaste am...¿que ocurre?— preguntó

— solo te estaba esperando — dije con una ligera sonrisa

— hey...— ella se acercó a abrazarme y yo me eché a llorar — cielo no llores — dijo — dime qué pasa...—

— no pasa nada...— susurré mientras me faltaba el aire.

— shhh...te voy a traer agua ¿si?...espérame aquí— ella se fue a la cocina y yo me quedé esperándola y tratando de calmarme.

En ese momento su teléfono sonó, indicando que le había llegado un mensaje y al verlo era de una tal Hailee y decía : "espero poder verte mañana"

Lo tuve que leer varias veces antes de que mi cerebro se diera cuenta de la situación. De seguro solo era para algo de trabajo, T/n no me haría eso.

Dejé el teléfono en su lugar y t/n vino con el vaso de agua y yo tomé de esta mientras que ella seguía abrazándome.

— ¿mañana no te puedes quedar conmigo y los niños?— pregunté

— cielo tengo mucho trabajo pendiente, pero el finde podemos dejar a los niños con Ashley y MK y así podemos estar solo tú y yo— dijo dándome un beso en la mejilla.

— los niños son muy pequeños, no los quiero dejar con nadie más—

— tienen cinco meses Liz —

— no te ocupas de mis hijos, que vas a saber — dije y ella frunció el ceño.

— ¿porque esa actitud?—

— porque estoy harta de que te la pasas trabajando y que no estés aquí con nosotros, te recuerdo que esos son tus hijos también — dije parándome algo alterada

— trabajo para darle todo lo que necesitan !—

— lo que necesitan es a sus dos madres a su lado ! Dinero hay suficiente!— grité

— pero si yo estoy aquí! Siempre estoy aquí! —

— no ! No lo estás!! Nunca lo estás!! — subí llorando hacia mi cuarto y t/n intentó seguirme — no vayas al cuarto a nada! Tal parece que te da más placer estar con la computadora que con nosotros— y ella se quedó abajo, mientras que yo me encerré en el cuarto a llorar.

Pov  t/n

Sabía que no me había ocupado de mi familia lo suficiente, pero sinceramente no quería que mis hijos tuvieran una infancia como la mía, quería que tuvieran lo mejor, todo lo que yo no pude tener se los quería dar. Esperé un tiempo, tomé agua y traté de calmarme y darle el tiempo a Lizzie a calmarse.

Luego de una hora subí las escaleras y fui primero al cuarto de los niños, esos dos pequeños y mi esposa eran mi vida. Luego salí y cerré la puerta, fui al cuarto de mi esposa y abrí la puerta lentamente, viéndola entre las sábanas, en la oscuridad del cuarto.

— bebé...— susurré y ella no respondió— amor— dije alargando la "o" y ella me ignoró una vez más — amor— dije alargando aún más la "o".

— ¿que quieres T/n?— preguntó girándose hacia mi y terminando cara a cara conmigo.

— lo siento ¿si?...se que me equivoqué— dije y ella bajó la mirada — lo siento mucho cielo, sabes que solo quiero lo mejor para ustedes...—

— ¿viéndote con otras mujeres?— preguntó y yo fruncí el ceño.

— ¿que? —

— ¿quien es Hailee entonces?— no veía enojo en ella, solo tristeza.

— es una compañera de trabajo que claramente cayó en mis encantos como tú lo hiciste...— dije besando su frente y riendo — pero yo ya estoy enamorada de mi hermosa mujer...— dije abrazándola.

— lo siento mucho...— dijo escondiendo su rostro en mi cuello.

— ¿qué pasa amor?—

— es solo que siento que ya no te gusto...ni si quiera entro en mi ropa y ya ni si quiera nos vemos, ni sexo tenemos y siento que ya no te gusto —

— ay bebé...— di un beso en su labios y luego me paré de la cama, tomé su mano y ella se paró.

La paré frente al espejo del cuarto y prendí la luz. Luego me paré detrás de ella y coloqué sus manos detrás de la cintura.

— ¿de que sirve esto?— preguntó

— bueno...ahora te voy a demostrar cuánto me gustas — dije y comencé a dar besos por todo su cuerpo, luego fui bajando, sin antes quitar su camisa, chupé sus senos haciéndola soltar unos gemidos y al mirar arriba vi como ella tenía sus ojos cerrados y las lágrimas salían de su rostro.

Subí hasta quedar rostro con rostro, tomé sus mejillas entre mis manos y besé sus labios.

— quiero que abras los ojos y veas lo hermosa que te ves...estás hermosa ahora más que nunca, eres la mujer más fuerte, más hermosa, más graciosa, más inteligente, más de todo que conozco cielo...tuviste dos hijos, ¿estás avergonzada de ser madre?— pregunté y ella negó tratando de secar sus lágrimas — entonces bebé...disculpa por haberte hecho sentir mal, yo solo no quería lo mejor para ustedes porque son todo lo que tengo y lo mejor de mi— dije y ella me besó nuevamente con mas fuerza.

Nos fuimos a la cama y quitamos nuestras prendas rápidamente, pasamos la noche entre besos y caricias, demostrando lo grande que era nuestro amor y dejándole saber a esta mujer que era lo más precioso que existe.

Oigan pueden hacer pedidos de one shots que quieran, la verdad esto son cosas que me vienen a la cabeza a las 12 de la noche, pero sinceramente no tengo inspiración asi que pidan !

One Shots Elizabeth Olsen Donde viven las historias. Descúbrelo ahora