Capítulo III

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[Autor: me desperté a las 1 o(^▽^)o continuaré con esto]

"¡No... Bueno..."

"¡Lo sabía! ¡Esa Wallen no sé qué intenta, robarme a mi Bell!", exclamó Hestia con ceño fruncido, mientras salía de la iglesia. Bell la siguió y le preguntó adónde iba.

"Tch, a una reunión importante", respondió Hestia de manera enigmática.

[En este punto, Bell debería conseguir la 'Daga Hestia', pero soy rayo macuin! :D]

Bell salió a caminar por la calle y, de pronto, se encontró con Syr. "Bell, prometiste comer aquí esta noche", le recordó ella, saludándolo.

"Ah, cierto", respondió Bell, recordando la promesa.

Entraron juntos al restaurante de Mama Mía y se sentaron. Mama Mía puso un delicioso plato de fideos en la mesa.

"¡800 Valis!" exclamó Bell, contando sus dedos con una cara desesperada.

"No tienes que ser tímido, come cuanto quieras", dijo Mama Mía amablemente.

De repente, todo el bullicio desapareció cuando la familia Loki entró al restaurante. Bell se sorprendió al verlos.

"Si está toda la familia, también está Aiz", pensó Bell, mordiéndose las uñas nerviosamente.

Todos en el lugar quedaron hipnotizados al ver a Aiz. Bell no pudo desviar la mirada, mientras la familia Loki se sentaba en una mesa cercana.

"Cuéntanos, Aiz", pidió Bete con una sonrisa pícara.

"¿Contar qué?", preguntó Aiz, un poco desconcertada.

"¿¡Qué!? ¿No hablarás? Entonces, yo lo haré", dijo Bete, con tono arrogante.

"Habrían muerto si vieran a ese conejo. ¡Solo sabía correr! Huyó desesperado y esperando ayuda. Qué desagradable, Aiz tuvo que salvarlo", continuó Bete, burlándose de Bell.

"Y como no sabía hacer más, huyó a la superficie cubierto de sangre. ¡Qué risa! Ese niño no merece sostener un arma", agregó Bete, dejando en evidencia su actitud arrogante.

"Basta, Bete, fue nuestra culpa dejarlo escapar", intervino Riveria, tratando de detenerlo.

Pero Bete no hizo caso y continuó acercándose a Aiz. "Dime, Aiz, entre ese conejo cobarde o yo, ¿a quién elegirías?"

Aiz no respondió y Bell, con la cabeza baja, salió corriendo del lugar. Aiz lo persiguió, pero al ver que él se alejaba demasiado, decidió detenerse.

Bell llegó al calabozo, murmurando: "¿Por qué? ¿Soy tan débil?", y comenzó a matar monstruos con rabia.

"Firebolt, Firebolt", pronunciaba mientras lidiaba con cientos de monstruos, abriéndose paso con cortes precisos. La familia Loki lo siguió y llegó justo cuando un minotauro se abalanzó sobre Bell.

Aiz saltó y detuvo el golpe. "¡Aparta! No dejaré que me sigan protegiendo. Me haré más fuerte", dijo Bell, colocando a Aiz a un lado.

El minotauro lanzó un golpe, pero fue detenido por la espada de Bell, creando chispas por todos lados. Bell contraatacó y logró darle un golpe en la mano, dejándolo incapacitado.

Bell giró su cuchillo para dejarlo sin posibilidad de usar su mano. El minotauro intentó golpearlo con sus puños, pero Bell los esquivó con agilidad.

"¿Qué pasa? ¿Este no era el cobarde de nivel 1?", dijo Bete, sorprendido.

"Parece que el niño se convirtió en hombre", añadió Finn con una sonrisa.

Bell continuó luchando y logró atravesar el pecho del minotauro, usando su magia para explotarlo con un "Firebolt". El cuerpo del monstruo no resistió y explotó, dejando caer su piedra.

Bell se desmayó de pie, con la espalda descubierta, dejando al descubierto sus estadísticas.

"¡Son todas altísimas! ¡Y tiene nivel 3!", exclamó Loki, sorprendido.

Todos estaban impactados por el poder de Bell.

"No puedo creer que sea casi tan fuerte como Aiz", dijo Riveria, asombrada.

Aiz se acercó a Bell y lo sostuvo, dándole un beso en la boca mientras decía "Te amo". Todos quedaron conmocionados, especialmente Loki.

Bueno, aquí termina el capítulo de hoy, o más bien de ahora, continuaré pronto con el Capítulo 4, ¡esperenlo! ¡Gracias por leer! Y si les gusta, ¡no duden en comentar! ¡Hasta la próxima!

Aiz, serás sólo mía! (Cap 14)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora