COMPROMISO

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Seongbuk-dong de noche luce como un bosque encantado, escarpadas calles que forman un laberinto de asfalto iluminado por los anuncios, y farolas verduzcas de las calles. Por el camino encantado conducía Chaeyoung el hada millonaria que manejaba una Hyundai Santa Fe.

La entrada de la residencia Kim era iluminada por leds que recorrían un   camino recto hasta llegar a la mansión. Una pequeña el acceso o salida.

Al interior de la mansión se podía ver una decoración, minimalista, combinando en armonía con lo que en principio era un estilo europeo. Chaeyoung percibió el sonido del Nocturno No. 2 de Chopin que venía de la sala.

Kim, la abuela de Chaeyoung, tocaba el piano con delicadeza, disfrutando cada acorde que producía el bello sonido, al llegar al clímax abrió los ojos y observó a su nieta.

— ¡Querida llegaste! ¿Cómo te fue?

— ¡Hola Abuelita! No quiero hablar sobre eso — Dijo Chaeyoung mientras sacaba un jugo de la nevera.

— ¿Día difícil?

— Sí, conseguimos el contrato con los viñedos en Francia, pero eso no importa, tengo algo para ti. — dijo mientras metía la mano dentro de una bolsa de papel. Tomó el sombrero y lo ocultó tras la espalda.

— ¡No veas! — La abuela cerró los ojos, y sonrió — Chaeyoung puso el sombrero sobre la abuela

— Mírate en el espejo

— ¡Qué hermoso! Un Bogart, qué bellos recuerdos me trae este tipo de sombrero.  ¡Gracias hijita!

— No es nada abuelita, lo mandé a confeccionar especialmente para ti.

—Hija, no gastes tu dinero así... 

—Tranquila, para eso trabajo — dijo apoyándose en el sofá y estirando las piernas.

— No haces otra cosa, me preocupa que no vivas — Kim caminaba mientras hablaba.

— Eres muy joven como para terminar como yo, la empresa puede esperar un poco, además tienes el apoyo del consejo, algunos de los miembros te cambiaron los pañales — Kim se detuvo frente aun mueble de caoba, abrió un cajón y extrajo un sobre membretado. 

— Llegó la invitación de un viejo socio mira — dijo mostrando el sobre a Chaeyoung. 

—Al parecer es un concierto, nos apartaron los mejores asientos, pero no quiero deshonrar la memoria de tu abuelo, los idols de ahora son mucho más atrevidos que los de hace años.

— ¿Una boyband?, estoy muy ocupada como para ir, podemos decirle a Hye-in que te acompañe.

— Ya hablé con ella, grito hasta quedarse sin voz, esos chicos le gustan mucho, acepto acompañarte.

— Querrás decir, a ti.

— No, vas a ir en representación mía, tomaré tu lugar en la compañía ese día.

— ¡No puedes hacer eso!

— Sí, puedo, lo hago por tu bien, ¡Tienes que vivir! Podrás conocer a chicos guapos y además tal vez llegues a casa con un nieto, o mejor aún con un bisnieto.

—¡Abuela!

— Tienes un compromiso, actúa como una chica de tu edad, el trabajo no lo es todo.

— Estamos en Corea, donde el trabajo y logros lo son todo.

— No puedes enfrascarte en  la rutina, el tiempo pasa incluso cuando no te das cuenta. Así que deja de ver el monitor por un solo día, y vive. Eso habría querido tu mamá.

—Mamá...

La introspección de Chaeyoung fue interrumpida por una videollamada de Hye-in.










No MoonlightDonde viven las historias. Descúbrelo ahora