Robo, asalto, asesinato... Estos comportamientos tenían objetivos y consecuencias evidentes, y venían acompañados de penas claramente estipuladas. Siempre que se pudiera atrapar al delincuente y encontrar las pruebas, las víctimas podrían alcanzar cierta aproximación a la justicia.
Pero esta justicia no siempre era posible de alcanzar.
Por ejemplo, que alguien tirara piedras a la carretera por diversión, provocando un accidente en el que muriera un transeúnte inocente; que alguien se llevara la tapa de un pozo y el cable de electricidad de una farola, provocando que una persona que pasara por allí de noche cayera al pozo y perdiera la vida; o que la flor y nata de la sociedad tomara alguna decisión de forma despreocupada, provocando que un indigente y sin techo perdiera la esperanza y se suicidara... ¿A quién había que acudir para pedir justicia?
Entre los familiares de las víctimas no había distinciones entre nobles y humildes; tampoco el dolor y la indignación distinguían entre el crimen leve y el grave. Si, al ver el daño que habían causado, el asesino pudiera soportar la culpa interna y el tormento de su conciencia toda la vida, tal vez eso podría haber sido un leve consuelo; por desgracia, la conciencia de la mayoría de la gente del mundo no era tan profunda. Enfrentados a una auto condena catastrófica, a menudo se dejaban abatir por la auto parálisis y una variedad de excusas...
No lo hice a propósito.
No te lo hacía a ti.
No esperaba que éste fuera el resultado.
Desde cierto punto de vista, yo también soy una víctima...
Entonces, ¿quién te puso en esa situación?
En el análisis final, el destino fue la perra homicida.
Había algo mal con el coche de servicio de la Oficina de la Ciudad. El volante nunca volvía a la posición neutral y los frenos reaccionaban con lentitud; uno siempre tenía la sensación de estar a punto de chocar con el coche de delante. Todo el coche desprendía un aire desanimado, como si estuviera a punto de ponerse en huelga. Luo Wenzhou había pensado que un derrochador como el presidente Fei, que tomaba los coches de lujo por autos de choque, se irritaría cuando hubiera conducido dos metros. No había esperado que sólo frunciera ligeramente el ceño al principio, para luego acostumbrarse rápidamente al destartalado coche de servicio, sin parecer en absoluto incómodo.
Luo Wenzhou se fijó en su recorrido y no pudo resistirse a preguntar: "¿Adónde nos dirigimos?".
"Al hospital privado Heng'ai", dijo Fei Du. "Zhou Huaijin permaneció un día en el hospital público y, al anochecer de ese mismo día, se trasladó a uno privado del que su familia es accionista. Su hermano dijo que el entorno ruidoso no era propicio para recuperarse de los traumas físicos y mentales; me imagino que fue para evitar a los medios de comunicación".
"¿No se hizo un pequeño corte en la pierna? Tao Ran dijo que sólo era una herida superficial. Repruebo vehementemente esta conducta de malgastar recursos médicos". Luo Wenzhou señaló a Fei Du. "Todos ustedes deberían tener más cuidado. La extravagancia y la corrupción suelen ser los primeros pasos de la ruina moral".
Quizás también le pasaba algo a Fei Du; nunca podía decir más de tres frases correctas a la vez sin que su sistema casi se apagara. En este punto, vio inmediatamente una oportunidad para burlarse un poco. "¿Eso cuenta como extravagante? Así que tenerte sentado aquí en mi coche ahora mismo, ¿estoy siendo extravagante más allá de lo rescatable?"
La mitad de la cara de Luo Wenzhou estaba oculta por un par de gafas de sol. Al oír esto, no pudo resistirse a suspirar. A pesar de haber recibido un golpe evidente, forzó un tono irónico. "Querida, sólo con una cara tan gruesa como la mía podría alguien aguantar tu mojigato estilo de coqueteo. ¿Este es el tipo de invitación que utilizabas antes para llevarte a pequeños idiotas a la cama? No me extraña que tuvieras tanto éxito".
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Mo Du | Lectura Silenciosa | Silent Reading
Misterio / SuspensoGénero: Misterio, Acción Pareja: Luo Wenzhou/Fei Du Capítulos: 180 Capítulos + 6 Extras. Sinopsis Infancia, educación, antecedentes familiares, conexiones sociales, traumas.... Buscamos y exploramos incesantemente los motivos de los criminales, pers...