siete||surgimiento

106 7 3
                                    

He ido a dónde me acaba de curar, no sabía para que pero dijo que era urgente, que tenía que hablar seriamente conmigo, estaba muy intrigada hasta que llegue.

Era una habitación donde no hay nada en el interior, no hay cama o armario ni una sola silla, era una habitación que en si daba mucho miedo por lo aterradora que era, no hay ventanas no hay luz natural, solo está la luz del candelabro.

Su presencia no tardó en llegar, lo podía sentir tras mío y se puso en frente de mi mirándome de pies a cabeza, ¿Que quería?

-¿Para que me necesitas? ¿Podemos hablarlo rápido? He quedado con sumire-chan.

Su silencio fue muy incómodo, hasta que decido hablar finalmente, dejo de flotar pisando el suelo acercándose a mi muy, pero muy lentamente.

-¿Me ayudarás? ¿Puedes?-decia cosas incoherente.

-claro, pero ¿Con que?-el misterio en mi aumento muchísimo más cuando decidió ya no hablar.

Era muy incómodo para mí tener que verlo y que no me diga que le pasa o que quiere hacer. En qué quiere que le ayude.

-como sabes-camino por la habitación dando vueltas alrededor mío-el árbol de cenizas está dormido ¿Lo sabes? ¿No?

Asiento-claro que lo sé ¿Pero por qué la pregunta?-se paro frente a mi nuevamente sin apartar la mirada de mis ojos y yo no apartaba la mia de los suyos.

-¿que prefieres?

-¿Cazar o ser cazado?

-¿Que tipo de preguntas son esas?

-creo que nunca te he dicho cómo funciona el árbol de cenizas ni como ataca, bien, es muy fácil de entender.

-cuando tenga las almas suficientementes para poder ser despertado, favorece a los demonios. Nos hace más fuertes.

-sus raíces están bajo amabas tierras, las tierras hirvientes y las tierras de dioses.

-en cualquier momento, esas raíces pueden atacar a los tuyos, claro, si el árbol de cenizas lo quiere así.

-es sorprendente, no sabía que así funcionaba. Nunca me lo he preguntado la verdad.

Trate de reír para romper la intensidad del ambiente el cual se volvió pesado y muy incómodo.

-ayudame-me abrazo fuertemente-por favor... Ayudame-su voz se escuchaba tan suplicante, me necesitaba y quiero ayudarlo.

-te ayudaré, pero no sé con qué puedo ayudarte.

-es muy, pero muy fácil, yashiro gracias por ayudarme, espero que desde el más allá algún día puedas perdonarme.

Chasqueo los dedos y cadenas atraparon mis manos así eso que me hablaron asia la pared chocando con la misma, para este punto el miedo me envuelve cada vez cuando lo ví acercandose, estaba sentada en el suelo y se arrodilló volviendo a mírarme.

-gracias por tu ayuda, aún que enamorarme de ti no estaba en mis planes no continuar con mi propósito tampoco estaba en ellos.

Las lágrimas empezaron a llenarse en mis ojos, le suplicaba con la mirada.

-¿Que...-

-facil, entregalé tu alma al árbol de cenizas.

En cuanto dijo eso, su vos resonó en mi cabeza, repitiendo cada palabra después de otra.

-aun que no tienes magia, tu alma es lo suficientemente poderosa para poder despertar al arbol-embozo una sonrisa-te lo vuelvo a repetir, gracias por tu ayuda yashiro.

El corazón del demonio || HananeneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora