•Sentado su majestad •| Hyunho + 18

Capítulo # 3

Warning
Smut
Sumisión
_____

Los pies del azabache trastabillan sobre la alfombra de la habitación del príncipe. Entre los muebles destacan el armario negro con manijas de plata, la pequeña mesita de noche junto a la gran comoda con postes de dónde cuelga una fina tela maguenta y la puerta lateral que conduce al balcón que se encuentra abierta de par en par.

Es lanzado contra la cama bruscamente. Está aturdido cuando Hyunjin lo mira. Dos segundos y ya el cuerpo del rubio se encuentra sobre él, presionando sus muñecas sobre su cabeza. Minho intenta levantarse, Hyunjin gruñe, lo agarra del hombro y lo tira nuevamente sobre su espalda.

Minho lo observa , congelado por la conmoción o la ira, no está seguro. Los ojos del príncipe están llenos de posesión y deseo, observa la cara del mayor de arriba a bajo, sus mejillas rojas por la excitacion. " Joder", piensa, acercando su cuerpo, el miembro de Minho se presiona contra la parte baja de su estómago con fuerza, puede sentir las gotas de presemen humedecer su camisa. Su capa yace a los pies de la cama, tirada sin más en medio del forcejeo.

-Que patético, puedo sentir tus fluidos deslizándose por mi abdomen y ni siquiera te he tocado. De hecho, llevas duro desde la fiesta, aún cuando toda esa gente te observaba fuiste capaz de frotarte contra mi pierna como una maldita puta.-ronronea casi en un susurro. El aliento de Minho lo deja en un jadeo débil, su miembro palpita, llamando la atención notablemente rápido, se estremece. Hyunjin debe notarlo, debe ver en sus ojos lo malditamente caliente que está porque sus labios se inclinan en una sonrisa llena de complacencia y percepción.

-T-Tú también lo estás.-murmura. Hyunjin arquea una ceja.

-No te he dado permiso para hablar.-Minho frunce el ceño cuando una mano golpea su rostro. Parpadea un par de veces, sus ojos se llenan de lágrimas de ira. Cuando gira su rostro, inmediatamente escupe hacia Hyunjin. Su saliva se desliza por el entrecejo y por el ojo izquierdo, llagando a sus mejillas . Intenta recuperar el control de su respiración, ignora los latidos rápidos de su corazón y el dolor latente de su miembro necesitado mientras le lanza a Hyunjin lo que espera sea una mirada mordaz a cambio.

-Púdrete, Hwang.- Hyunjin muerde su lengua, intentando conservar la calma. Limpia su rostro en su antebrazo. Utilizando solo una de sus mano para presionar a Minho sobre la cama, otra agarra su mandíbula con fuerza, obligándolo a mirarle.

-Utilizare esa misma saliva como lubricante, como sigas.-se sumerge, con los labios flotando justo encima de los del hombre debajo de él. "¿Por qué es tan difícil respirar teniendo su rostro tan cerca?." -Vas a ser mi pequeño depósito de semen toda la noche. -Minho suelta un pequeño gemido, y se odia por eso.

Se odia a sí mismo porque en cuanto la lengua de Hyunjin entra a su boca su cuerpo se dispara desesperadamente por contacto, envolviendo sus piernas al rededor de las caderas del rubio y pasando sus dedos por su cabello. Se odia porque su miembro sigue humedeciéndose contra el cuerpo del otro aún cuando puede escuchar el gruñido del hombre sobre él.

Trata de controlarse cuando los labios de Hyunjin se despegan de los suyos, bajando por su cuello, deslizándose por su abdomen hasta llegar a su pelvis. La rodilla del príncipe estira sus piernas, Minho muerde su labio para evitar retorcerse. Se siente demasiado expuesto. Se estreme cuando el otro deja un cálido beso junto a la base de su miembro. El aliento caliente es suficiente para que suelte un quejido alzando sus caderas sutilmente.

Tiene miedo de mirar lo que esta pasando, de pronto toda sensación de la boca de Hyunjin desaparece. Minho se queja en el fondo de su garganta, está tan duro que piensa que se va a volver loco.

-Hyun-Hyunjin-susurra, su voz débil y áspera. Se ha sumido tan jodidamente.

-¿Hm?

-¿Qué de-demonios estás haciendo?.-Hyunjin agarra la base de su polla con una mano apretando tan fuertemente que duele, de todos modos gime ante el inesperado contacto, volviendo la cabeza hacia las almohadas.