_______ Shvagenbagen es la hija menor de un familia de metaleros, considerada la ovejita rosa.
Era muy diferente a su familia en cierto aspecto, o eso creían.
¿Cómo será la historia de esta chiquilla de lengua filosa?
- Advertencias -
• Serás una ni...
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La puerta de la oficina donde se hallaba el padre de familia fue abierta por su hijo de cabellos naranjas.
Sin dejar de hacer lo que hacía, le habló para saber cuál era la razón de su presencia.
-- ¿Qué sucede, Heavy?, estoy ocupado -- cuestionó en un tono serio.
-- Umm... hubieron problemas en la escuela -- respondió apenas dejando ver su rostro.
Glam, el padre de familia, suspiró y miró hacia la puerta donde su hijo se asomaba.
-- Dime, ¿qué pasó ahora?
Heavy parecía no saber cómo decirle a su padre la situación.
-- Bueno... en realidad...
El chico no sabía cómo explicarle aquello al hombre mayor o más bien, no sabía si iba a creerle.
-- Habla de una vez -- Glam dijo algo ya fastidiado.
El de cabello naranja abrió la puerta revelando a la más pequeña de la familia, (N).
Miró confundido a su única hija para después regresar su vista a su niño de en medio.
-- Es que, ella es quien tuvo problemas en la escuela, papá
Glam estaba algo confundido de que hayan llamado por parte de la escuela de su hija más joven.
La nena miró a su padre y le regaló una dulce sonrisa inocente. Este solo alzó una ceja y se quitó los lentes para después ponerse de pie y encender la luz de su oficina.
-- ¡De acuerdo! -- exclamó con una sonrisa y su tono de voz cambió.
Se arregló a su estilo único y original, para después salir de la casa junto con (N) y Heavy detrás de él.
El de cabello largo y naranja ayudó a su hermanita a subir al coche y abrochar su cinturón de seguridad.
Glam se dirigió a la escuela primaria donde la nena estudiaba, fueron solo unos minutos y llegaron a su destino.
Los tres bajaron y llegaron al salón donde dos maestros ya estaban esperando al padre de (N).
-- Buenas tardes, me informaron sobre la situación con mi hija
El maestro le sonrió amablemente a Glam.
-- Gracias por tener tiempo y venir, verá, la razón por la que lo llamé fue... -- más el hombre fue interrumpido.
-- ¡Es porque su hija es una total mal educada! -- gritó la profesora señalando a la unica nena entre ellos.
Sin embargo la menor no se inmutó ante su comentario, solo tenía su tierna sonrisa mientras sostenía la mano de su hermano mayor.
