Noche Purpura

Cap. 4

Me encontraba en un establecimiento donde vendían ropa, hablando con el jefe de este mismo. Me situaba en una sala apartada, sentada en una silla blanca con las manos encima de mis piernas. El hombre de enfrente tenía una lista llena de preguntas para ir rellenandola. Para abreviar, fueron preguntas triviales del palo como "donde vives"," hobbies" etc...
El jefe a continuación me dio el uniforme el cual era una boina pequeña azul, junto a unos pantalones cortos y camiseta corta color azul y blanca también con el logo de la tienda en boina. Después de colocarme el uniforme el jefe me acompaño a conocer lo que sería mi compañera de trabajo. Yo me encontraba fuertemente nerviosa, pletórica ,pero debía componer compostura así que trague saliva y fui de frente junto con aquella chica. Esta chica llevaba el color rojo escarlata con un peinado puntiagudo y rapado por los lados, un eye linner bien hecho y piercing negro en el labio inferior.

-Hola buenas, encantada. Me llamo Patricia, un placer -dijo aquella chica dedicándome una reverencia-

Yo al ver eso hice lo mismo, di la.misma reverencia y con algo de nervios dije

-Y-yo, s-soy , DALIA -dije en un grito-
El placer e-es mío

Cuando grité, el jefe y la chica se miraron ambos algo asombrados para luego mirarme con una sonrisa tranquilizadora

-Bienvenida a Flipper clothes -dijo él gefe-

Yo sonreí algo tranquila, ya estaba trabajando ,eso me encantaba además de ser un trabajo a tiempo parcial. Por lo que tendría tiempo de explorar este lugar.
Me giré a ver la tienda, esta misma contaba con colores rosas y amarillos, un escaparate donde se presentaban los diferentes conjuntos, probadores con cortinas blancas. Además el lugar contaba con dos plantas, la primera eran vestidos, sombreros, bolsos. Y la segunda era la sección de ropa interior, ropa de hombre y de niño.
Yo miré satisfecha todo el lugar, para cuando volví en mi, me percaté de que el gerente se había marchado. Estaba a solas con esa chica, la muchacha se encontraba tras la caja registradora. Sin dudarlo ni un .omento me acerqué hacia ella para conocerla un poco mejor

-Bien... ¿Y cuanto llevas trabajado aquí? -pregunte-

-Un año y medio -dijo ella mirándome a los ojos
Tu eres la nueva ¿No?

-Supongo que si -dije extrañada-

-¿Y como acabastes en la playa? -preguntó ella-

-pues... Espera un momento, ¿Como sabes eso?

-Me lo han dicho. En un lugar como este que no suele pasar nada de lo común, de repente , aparece una chica en la playa - dijo ella usando el ordenador al lado de la caja-

Al decirme eso, quería decir que habían hablado de mí a mis espaldas. Cosa que me causaba algo de tristeza, una tristeza como si fuera una llama interior

-Eso significa que... Han hablado de mí. Realmente me causa algo de rabia -dije yo-

- Te entiendo Dalia. Pero no es momento de estar triste. Así que aguanta esas ansias de tristeza

Pensé que tenía razón por lo que me recompuse y me puse detrás de la caja registradora. Cuando Patricia, fue a reponer ropa del desván yo me quedaba tras la caja por si había a algún cliente que atender. En el ordenador vi como había un cuento, al parecer de licántropos, pensé que seguramente sería algo que Patricia estuviera leyendo. En ese momento de silencio se escuchó una voz

-Pero bueno ¿Que haces aquí?-dijo una voz-

Gire mi cabeza y vi que era Shaila, ella estaba allí la cual se veía algo sorprendida

-Pero bueno...Shaila -dije sorprendida-

-La misma. Que sorpresa verte aquí ¿Estás trabajando? -preguntó ella-