Cacht 22 [ShikaTema]

Capitulo 5

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Ella lo miró, atonita. Esto no era exactamente lo que ella esperaba oir. Tacha eso, esto era lo más alejado que podía imaginar de lo que esperaba oir. Si él le hubiera pedido que abandonara su misión y se fuera corriendo al País de las Olas con él para vivir en la playa, se habría sorprendido menos.

Pero probablemente igual de enojada.

Ella gruñó irritada y se sostuvo la frente con una mano. "¡Shikamaru! ¡Ni siquiera puedes levantarte de la cama para pedirme que me case contigo y luego vas y dices algo así en medio de la calle como si nada! i¿Qué diablos te pasa?!" Ella detuvo su mano. Tenía ganas de golpearlo en la parte posterior de la cabeza.

"¡Ay! ... Dios..."

Ups, ahí fue.

Ya estaba caminando hacia la torre del Hokage.

"Tienes suerte de que no tengo tiempo para darte una paliza adecuada".

"¿Cual es el problema?" preguntó mientras aceleraba a regañadientes para mantener el ritmo de ella.

"¿Cuál es el problema?' ¿Tienes el descaro de preguntarme eso?"

-Temari, ¿que...?

"¡No me hables ahora!" dijo ella, su voz tensa. "¡No puedo creer que solo...!"

"¿Qué? ¿Qué pasa? ¿Cómo es eso tan malo?"

"¡Shikamaru!" ella gruñó. No sabía qué la estaba enojando más: lo que acababa de preguntar o el hecho de que realmente no parecía ser gran cosa para él en absoluto.

"Es una pregunta válida. Es razonable esperar hablar de eso en algún momento, ¿verdad? ¿Qué se supone que debo hacer, sentarte a cenar a la luz de las velas y ponerme de rodillas? Qué dolor. Nunca había hecho esto antes tampoco, sabes".

Extendió la mano para tomar su mano y se quedó atónito cuando ella rápidamente se soltó de su agarre sin siquiera volverse a mirarlo.

"¿Por que estas tan enojado?" preguntó, perplejo.

No estaba tan enfadada como sorprendida. La mayoría de las personas tenían diferentes reacciones externas a la ira y el shock. Temari no era la mayoría de la gente. Las cosas que no entendía la agitaban, y no estaba por encima de mostrarlo en las circunstancias actuales. Ella no podía comprender por qué él sentía la necesidad de hablar de esto aquí, Ahora. ¡De todos los tiempos y lugares, aquí y ahora! Y todo el tema le heló la sangre tan pronto como él lo mencionó en voz alta. Estaba empezando a comprender el hecho de que se iba de su país para, esencialmente, poder acostarse con él todo el día de vez en cuando. Eso fue bastante malo. Esto ni siquiera lo había considerado todavía.

Ella no quería considerarlo. Era, para ella, una pregunta realmente cargada.

Un hecho que él no parecía entender.

"Más despacio."

"Tengo una misión. Tengo que ver al Hokage", dijo concisamente.

"¿En serio? Vamos, no puede ser tan importante..."

"Solo... retrocede, ¿de acuerdo?" ella le gruñó. Sus pies se detuvieron mientras los de ella seguían moviéndose hacia la torre del Hokage. Parecía estupefacto. Nunca antes lo había rechazado tan descaradamente.

Pensó que sabía lo que estaba haciendo. Ella siempre reaccionaba mal al principio, pero luego siempre cambiaba. Pero se sintió un poco enfermo al verla alejarse así.