Capitulo 15

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La noticia

Hades

Desperté de mal humor, ayer  regrese a la oficina a porqué se me habían olvidado las malditas llaves de la casa, cuando la vi bajar del elevador se veía preciosa en ese vestido de seda color rojo, resaltaba perfectamente sus curvas y se veía preciosa, estaba seguro de que se iba a ver al idiota del novio y eso me molestaba de sobre manera, mas después de verlos tan juntos después de ese beso, ella trataba de evitarme a toda costa lo bueno es que a partir del lunes ella sería totalmente mía durante un mes y yo le encargaré de recordarle que nosotros simpre vamos ser el uno del otro, se que parezco un idiota diciendo esto pero enserio la amo y no pienso volverla a perderla sin importar que este con ese estúpido novio.

El día de hoy había anunciado con su secretaria qué no iba  a presentarse hasta la tarde, lo cual se me hizo bastante raro, más cundo solo llegaron sus amigos pero el novio idiota y ella no.

A la una de la tarde se digno a llegar y vi como Rita y todos sus  la saludaban y la abrazan y felicitaban, ella estiró su mano izquierda y les mostraba un anillo, pero no cualquier anillo si no una sortija, una maldita sortija qué hizo qué viera todo rojo de ira, no ella no se podía casar no con otra persona que no fuera yo, malditas sea ella jamás había querido casarse hasta que estuvo conmigo y ahora lo iba a hacer con ese idiota, o no eso sobre mi cadáver.

- Qué esto es un evento social o algo parecido, a trabajar qué para eso se le paga - dije furioso a todos, y todos se fueron a sus puestos.

- Qué te pasa como porque les gritas así?? -

- Porque este es un lugar de trabajo, no un maldito salón de eventos -

- Ok muy bien, pero no quiero que vuelvas a tratarles así a nadie - dijo marchandose furiosa a su oficina, la seguí y entre detrás de ella cerrando la puerta - qué haces aquí, largate de mi oficina - dijo empujandome, a lo cual aproveche para tomar su mano en donde estaba su sortija.

- No te va para nada, recuerdo perfectamente la descripción de la sortija perfecta y esa no es ni de asomo - dije viendo la sortija qué quite de su dedo.

- Y tu como sabes que me va y que no - dijo molesta arrebatanfome la sortija.

- Porque yo fui la que te convencí de casarnos, yo fui con el que planeaste tu boda, yo soy el que sabe que sortija añoras y como es que te encantaría que te la dieran, también se el tipo de vestido que elegirías, los centros de mesa, el color de las damas y todo lo que tiene que ver con ella - dije con una sonrisa burlona.

- Si pero contigo no voy a cumplir los planes -sijo con los ojos cristalinos, no se si por rabia o que

He de admitir que eso dolió.

- Pero soy con quien quisieras hacerlo  - dije dándome la vuelta y saliendo de su oficina.

Los días pasaron bastante lentos  para mi disgusto pero salí rumbo a Cancun el domingo ya qué Hera va a viajar el lunes y quería estar antes que ella ahí para así no darle oportunidad a refutar y no quererse ir ya estando halla ya no podría regresar al menos que fuera una emergencia.

Llegue a uno de el hotel que había acordado con mi secretaria el mismo donde Rita hizo la reserva para Hera, pedí la habitación justo alado de la de ella, para así estar más cerca de ella, y dado a que era temporada alta no había más habitaciónes.

Llegue me instale y deje mi maleta para que desempacar a todo, como llegue temprano aproveche para ir a empezar a inspeccionar el terreno, en cuanto llegue a él se me hizo maravilloso estaba justo enfrente del mar, era una playa tranquila, con agua cristalina y donde estaba seguro que nuestros clientes estarían encantados, en cuanto vi la playa me acorde de ella.

Vi las fotos de su compromiso por su Instagram, se que ella nunca hubiera querido algo así, ella siempre soñó con algo diferente, y también se que ella quería un anillo en especifico y en una caja en especial, ella amaba harry Potter, recuerdo que me hizo verme todas de principio a fin hasta que logro qué me gustaran, se sabía los diálogos de memoria, y una vez en Internet había visto un estuche de anillo de una snich dorada, recuerdo que me dijo que si le pedía matrimonio y la sortija no estaba en una caja así diría que no.

Regrese al hotel y baje al restaurante para cenar, me senté y pedí aguachiles y un ceviche de camarón, con una cerveza, mientras esperaba mi cena revisaba mi celular, tenia más de 10 llamadas de Taylor y varios mendajes reclamándome qué no le dije que iba a salir de viaje por tanto tiempo y que no la lleve conmigo.

Cene y subí a mi habitación, mañana sería un día muy pesado, y más porque conociendo a Hera va a estar insoportable.

Desperté con la alarma del celular , abrí las cortinas y pude apresiar una vista maravillosa desde mi ventana, también pude ver como es que llegaba el taxi de Hera, la vi bajar de el y mi sonrisa se hizo grande, entre al baño me hacie, hice mis necesidades y me cambié por algo informal y cómodo ya qué tenía un día pesado y con calor, me puese un pantalón de mezclilla y una playera polo color azul marino, y unos tenis polo blancos, me peine y baje al restaurante donde estaba los arquitectos.

Me senté justo de espaldas a la puerta, en cuanto los arquitectos voltearon hacia la puerta supe que ella había llegado ella causa ese efecto, el efecto de que todos volteen a ver sin siquiera lucir extravagantes ni mucho menos su simple presencia llamaba la atención de todas las formas. En cuanto llego a la mesa y me vio su cara fue un poema y yo estaba bastante complacido con eso, hasta que vi unas marcas en sus brazos como si alguien hubiera apretado muy fuerte esa zona.

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