🖤🤍Deseó profanó🤍🖤

Un incidente desafortunado

En la mansión Nostrade hay una atmósfera animada, la cual es generada por Neon, quien llena de dicha se prepara para recibir a su prometido. Todos a su alrededor solo pueden seguirle el juego con la mejor expresión posible.

Kurapika, quien estaba especialmente irritable, no soporta más las extravagancias de su señorita. Melody se había dado cuenta de ello.

A pesar de su sonrisa y delicado trato, el corazón de Kurapika palpitaba tan fuerte, y acelerado, que generaba una molestia para el excelente oído de su compañera.

La toma de la mano, y se disculpa con su señorita, alegando un ligero mareo, y salen de la habitación. Mientras, Kurapika la mira con preocupación, pues teme que se haya enfermado, Melody le sonríe.

Melody- No debes sentirte tan impaciente, sé que no tarda en venir.

Este comentario incómodo a Kurapika, recriminando a Melody el decirlo como si de alguien querido se tratara. Kurapika lo odia, tanto que el solo pensar en tenerlo cerca le hace hervir la sangre, y esto se ve reflejado a través de sus ojos, los cuales, a pesar de llevar puestos lentes de contacto, no logra ocultar su tono rojo carmesí.

Kurapika- Como lo dices de esa forma, tú sabes lo qué me hizo a mí, a mi gente, él arruinó mi vida. Lo único que deseó ahora es golpear su rostro, acuchillarlo, y... quemarlo vivo, junto con todo lo que ama.

Melody solo puede ver, con tristeza, a Kurapika ser absorbida por sus emociones, sin poder hacer nada, más que estar a su lado, y sostener su mano, como cuando se conocieron en el orfanato y lloraba todas las noches por llamando a sus padres.

Kurapika se tranquiliza al ver que su amiga solo desea lo mejor para ella y se disculpa por enojarse con ella. Lo que menos desea es alejar a su única familia por culpa de ese hombre al que odia. No vale la pena.

Kurapika- Melody perdón no quería... solo que tratándose de ese maldito yo... lo siento.

Melody- Está bien, yo también lo siento, solo deseaba subir tu ánimo, y no pensé bien lo que iba a decir.

A pesar de todo, su odio hacia él, sabe que todavía debe de vengar a su gente, evidenciar que lo ocurrido en su pueblo no fue un accidente, y para ello necesita pruebas, y sabe que para eso debe de ganar su confianza, acercarse a él, luego exponerlo al mundo como él mostró, traicionero que ella sabe que en el fondo es. Imaginar el día en que por fin hará pagar a su enemigo le ayuda a seguir adelante.

Repentinamente, una voz interrumpe el momento, y se puede apreciar la silueta de dos hombres acercándose, es el señor Nostrade quien viene acompañado de un hombre, con traje de mayordomo, y aspecto lúgubre.

Señor Nostrade- ¿Está mi hija disponible para visitas?

Melody- Aún está arreglándose... señor, no tardará.

Señor Nostrade- En ese caso, díganle que la espero en mi oficina lo antes posible, por favor.

Ambas señoritas solo pueden asentir con la cabeza, intrigadas por lo que acaba de ocurrir, entran rápidamente a la habitación. Dentro Neón está lejos de estar lista, y al ver a ambas exaltadas le pregunta a Melody si ya está mejor. Kurapika interrumpe oportunamente, y le dice a Neón que su padre la espera con urgencia, en compañía de otro hombre.

Kurapika- Disculpe la tardanza mi señorita, pero su padre la espera en su estudio en compañía de un hombre, que al parecer es sirviente de la familia Zoldyck.

Neón reacciona entusiasmada y les pide a ambas que se apresuren y la ayuden a estar lista, y ambas solo asienten con resignación. Ya estando lista se dirige al estudio de su padre, acompañada por sus sirvientas, las cuales lucen exhaustas. Se cierran las puertas del estudio, y se puede apreciar el disgusto en el rostro de Nostrade.