🕸️Dominio🕸️

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Con la llegada de un nuevo día, muchos sucesos se avecinan en la vida de Chrollo, estos afectarán sus decisiones a futuro de gran manera.

La luz del sol entra levemente a través de la ventana de la oficina, a pesar de esto, él continúa durmiendo, al menos hasta que es despertado repentinamente por los golpes en la puerta fuera de la oficina, provocando que se caiga al suelo, y golpeándose la cabeza.

—¡Espere! ¡Ya voy! ¡Un momento! Dios, ¿Qué? ¿Qué hora es?—

Era la hermana Shizuku, la cual se preocupa al ver que Chrollo aún se encontraba en ropa de dormir.

—Padre ¿Qué sucede? Aún no se ha vestido—

Eran las 6:30 de la mañana y debía de oficiar una misa a las 7:00 ya que era domingo y los feligreses estaban comenzando a llegar.

Sin perder tiempo, Chrollo se dirige al baño a tomar una ducha, y se viste con gran rapidez, dejando a la hermana nerviosa, esperando afuera.

Cuando finalmente sale, se dirige apresurado a oficiar la ceremonia, dejando a la hermana Shizuku bastante desconcertada por su descuido, el cual se lo atribuía al cambio de habitación la noche anterior.

Rumbo a la capilla se encuentra con Pariston, listo para reemplazarle en caso de no llegará a tiempo.

—Padre Chrollo, al final si se presentó, me alegra que la hermana lo haya despertado a tiempo, por poco y termino siendo yo quien oficie la misa—

Mientras decía estas palabras con una sonrisa desagradable en el rostro, Chrollo solo lo observa y procese a ser él quien oficie la misa, dando las gracias a todos los presentes por asistir, y presentando a Pariston como invitado en su iglesia.

La ceremonia dominical transcurre con normalidad, lo cual tranquiliza a Chrollo, a pesar de sentirse exhausto y deshonesto por lo ocurrido la noche anterior, lo único que le haría sentir mejor en ese momento era confesarse, pero su única opción para ello sería Pariston lo cual lo haría sentir aún peor.

Una vez terminada la misa, se acerca la hermana Shizuku juntó a dos personas más, eran Feitan y Phinks, a quienes les había explicado la situación con respecto a la cabaña, haciendo que Chrollo se alegre al verlos.

—Phinks, Feitan me da gusto verlos—

—Bueno, no es como si tuviéramos muchas opciones, la hermana prácticamente nos arrastró hasta aquí—

—Estaba por trasplantar unas bougainvillea, cuando la hermana nos explicó su lamentable situación—

La hermana los reprende por la forma tan irrespetuosa en la que se dirigieron al padre, recordándoles que el mantenimiento de las instalaciones es parte de sus responsabilidades, cuando Chrollo interrumpió y, amablemente, les pidió que le ayudaran

—Sé lo eficientes que son y realmente les agradecería su ayuda—

Ambos solo guardaron silencio, avergonzados y apenados por su actitud anterior, no eran el tipo de personas que correrían a ayudar a otros, y sus personalidades eran algo intimidante, pero apreciaban genuinamente a Chrollo por lo que le ayudarían sin pensarlo mucho.

Siendo que ya estaban de acuerdo, solo faltaba ir a ver la cabaña en cuestión, a lo que Chrollo pidió disculpas por no poderlos acompañar, ya que su lista de tareas apenas estaba empezando.

Phinks y Feitan se encargarían de todo y la hermana los ayudaría. Chrollo estaba sumamente agradecido con todos por ayudarle en esto, dejando sus deberes de lado. En ese momento, Pariston interrumpa la conversación entre ellos.

—Qué conmovedor es tener a personas dispuestas a doblar su trabajo por usted, Padre, es muy afortunado—

En voz baja, Phinks le pregunta a Shizuku ¿quién era el hombre?

—¿Qué pasa con él? No luce confiable en absoluto—

—Es una larga historia, hablaremos de eso, luego— contesta la joven monja.

Rápidamente, Chrollo se disculpa, ya que debe de reunirse con Milluki Zolldyck en un par de horas y todavía debe de ordenar algunas cosas. Antes de siquiera darse cuenta, Pariston termina hablando solo.

— Haber vuelto aquí fue la decisión más divertida— dijo para sí mismo.

Ya en su oficina, Chrollo suspira, y se sienta en el sofá, mientras observa el desorden que dejó por salir apresurado esa mañana, esto simplemente no es de su agrado, siempre había sido un hombre muy ordenado y paciente, sin mencionar que se sentía abochornado por sus acciones de la noche anterior.

—No debo dejarme llevar por mis instintos, ¿Cómo pude deshonrar así este lugar sagrado? Soy una vergüenza, lo mejor será pedirle a la señorita Neon y a su padre venir a verme de ahora en adelante, ya que sería incómodo ver a la señorita Kurta, al menos por ahora.—

Mientras recoge el desorden, comienza a sentirse algo mareado, en seguida escucha que tocan la puerta, por lo que camina torpemente hacia esta, mientras se pregunta quién podría ser, no parecía haber alguien esperando alguna audiencia al terminar la misa.

Al abrir la puerta, por un breve instante solo se aprecia un ramo de rosas blancas las cuales lo hacen retroceder al ver que era Kurapika.

—Señorita Kurta ¿Qué hace aquí?—

—Buenos días, padre, disculpe la intrusión, pero quería devolverle algo que creo le pertenece, espero no molestarlo, parece estar ocupado. Parece valioso, así que vine personalmente—

Chrollo no entiende a lo que se refiere y no puede apartar la mirada de su rostro, las rosas, y su silueta en general le resulta fascinante, la belleza que desborda, y el cómo se acerca a él sin dejar de verlo, hace que se sienta correspondido.

Su mente y cuerpo estaban desconectados, lo que había provocado que actuara impulsivamente, antes de darse cuenta le toma del brazo, dándole un beso y haciendo caer el rosario y las rosas al suelo, cerrando la puerta tras de ella en el proceso.

Siente como el tiempo se detiene, el calor sube por su cuerpo, la lengua de la joven entrando en su boca.

Es como si hubiera olvidado quién era, a estas alturas solo era un hombre cayendo en la tentación, sin pensar en nada, dominado por algo más haya de él.

Se dejan caer sobre el sofá, sin cuestionar lo repentino y fuera de lugar que estaban sus acciones, tanto las del hombre como las de la vengativa joven, la cual debía detenerlo o perdería la visión de su objetivo.

Durante el beso, Chrollo siente un repentino dolor en sus labios, esto detiene su desenfreno, dándose cuenta de la sangre que comparte con los labios de Kurapika proviene de los de él.

Este es, sin duda alguna, el preludio de algo más íntimo, más… fuerte.

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⏰ Última actualización: Oct 18, 2023 ⏰

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