Hades x Qin Shi Haung

30 1 0
                                    


Apolo se resistió al principio, pero al ver la desesperación de Hades, acabó cediendo. Él era su mejor amigo, después de todo; él sabía lo difícil que era para él encontrar el amor.

—Está bien —dijo Apolo, con un suspiro—. Vamos.

Los dos alfas salieron a la calle, el aire frío les aguijoneaba el rostro, pero ambos se encogieron de hombros, decididos a seguir adelante a cualquier precio. El bar estaba a unos minutos de distancia, y apenas habían dado unos cuantos pasos cuando Apolo se detuvo.

—¿Qué ocurre? —preguntó Hades, viendo su cara.

Apolo se quedó mirando al frente, perplejo.

—Es él —dijo—. Qin Shi Haung. Está aquí.

Hades siguió la dirección de la mirada de Apolo y vio a un alfa de cabello oscuro, con una chaqueta de cuero marrón y unos pantalones vaqueros, que se acercaba por la calle.

—Oh, no —dijo Hades.

Apolo le puso una mano en el hombro.

—No te preocupes. Ya lo arreglaremos.

Los dos alfas se quedaron allí parados, mirando al alfa de enfrente. Qin Shi Huang los vio y los saludó con una ligera inclinación de cabeza. Él también les sonrió, mostrándoles que estaba dispuesto a hablar con ellos.

—Hola —dijo Hades, con una sonrisa forzada.

—Hola —respondió Qin Shi Huang, con una voz baja y ronca—. ¿Estáis aquí por el bar?

—Sí —contestó Apolo—. Estamos aquí para conocerte.

Qin Shi Huang asintió con la cabeza.

—Entonces, ¿qué os trae por aquí?

Hades se pasó la lengua por los labios, nervioso. Sabía que tenía que decir la verdad, que si no sería incapaz de mirar a Qin Shi Huang a la cara.

—Es… es porque yo —empezó Hades, tragando saliva—. Yo me enamoré de ti.

Shuumatsu no Valkyrie One Shots (Ships BL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora