La familia Hashibira|DouKoto|Douma x Kotoha|Era moderna x lectora

Cap. 01: Douma y Kotoha

Douma ahora tenía en sus brazos a una bebé, una muy linda que era igualita a él como si fuera una especie de clon suyo. La bebé tenía su piel pálida, su cabello rubio platinado y, su rasgo físico más característico y único, unos ojos arcoiris como los de el.

En el piso había una cesta, la cuál venía con una nota.

Quédate con tu bebé. No estoy lista para ser madre así que es toda tuya, renunció a tener alguna vez una responsabilidad como su madre o algo.

Esa nota le trajo a Douma el recuerdo de que hacía 9 meses debido a emborracharse en un bar se acostó con una chica, pero no había tenido la más pálida idea de que la había embarazado.

Pero si se quedaría con la bebé, era claro que era su hija biológica, además no pensaba abandonar a un ser inocente que no tuvo la culpa de nada, si hiciera eso la conciencia no dejaría de carcomerlo, por lo que decidió quedarse con la niña y atender las necesidades de ambos el solo, ser un padre soltero.

Cuando la bebé despertó lo primero que vio fue su rostro. Douma pensó que la niña se asustaría, pero al contrario, la niña estiró sus brazos hacia la cara de Douma queriendo tocarla mientras sonreía y reía con un brillo especial en sus ojos. Douma se sintió tan contento que una gran sonrisa se formó en su rostro, su bebé, su niña, su hija lo había reconocido como su padre.

...

Kotoha por otra parte no lo estaba pasando nada bien. Estaba llena de golpes corriendo por las calles desesperada con su hijo en brazos. Su marido, alguien abusivo y egoísta, la había golpeado, además que trato de golpear a su hijo quien se llamaba Inosuke. Kotoha no podía permitir que su esposo golpeara a su hijo así que terminó por golpear a su esposo en la cabeza con una sartén de la cocina, dejándolo inconsciente. Cosa que aprovechó a su favor para agarrar a Inosuke y salir corriendo de esa casa.

No sabía bien a dónde ir, ella había crecido en un orfanato del que salió a los 18 años por mayoría de edad sin haber sido adoptada jamás por nadie, por lo que no tenía familia, ni padres ni hermanos, nada. Terminó por tocar la puerta de una casa, las cortinas estaban abiertas y pudo escuchar unas voces, una parecía ser de un adulto mientras que la otra parecía ser balbuceos y risas de un bebé, por lo que dedujo que había gente en la casa.

Douma al abrir la puerta se horrorizo al ver el rostro todo golpeado de Kotoha, con sus ojos verdes esmeraldas llenos de lágrimas, su cabello negro con puntas azules desordenado y su piel blanca llena de moretones en sus brazos. Hablando de brazos, en estos Douma pudo notar que llevaba a un bebé igualito a ella, con su misma cara incluso, facciones finas que parecían delicadas, ojos esmeraldas como los de la mujer enfrente de el, su piel blanca como la de la mujer y, como no, su cabello también negro con puntas azules como el de la mujer, solo que el bebé no tenía ningún tipo de golpe, estaba dormido.

Douma sintió como su hija, a la cuál llevaba en brazos, se aferraba fuertemente a sus prendas.

- Señorita...¿Que le pasó? - preguntó Douma.

- Por favor ayúdeme, mi esposo me golpeó y trató de golpear a mi bebé - respondió Kotoha tratando de aguantar el llanto - pude dejarlo inconsciente pero seguro ya despertó y me debe estar buscando muy furioso.

- Entre por favor.

Kotoha entró a la casa, Douma la guío a la sala dónde procedió a curarla dejando a su hija en su regazo. Kotoha se había sentado en un sillón enfrente de Douma con Inosuke en brazos, soltando pequeños quejidos mientras Douma la curaba por el dolor que le provocaban las heridas.

Douma terminó de curarla, sus brazos quedaron cubiertos de vendas, su ojo izquierdo tenía un parche al igual que su mejilla derecha y Kotoha sostenía un pañuelo para parar el sangrado que de un corte que tenía en el labio. Ella miraba a la bebé que jugaba con los dedos de Douma, haciéndolo reír.

- ¿Esa es su hija? - preguntó Kotoha, Douma asintió - lo supuse, es igualita a usted. Es muy linda y tierna.

- Su hija también es muy linda y tierna, es como una mini copia tuya - dijo Douma, pero Kotoha empezó a reír confundiendolo.

- El es Inosuke, siempre me dicen que parece una chica pero en realidad es un chico - eso dicho por Kotoha sorprendió en grande a Douma.

- ¡Ay, perdón! Es que si parece una chica.

- No pasa nada. Muchas gracias por la ayuda, señor...

- No me digas señor por favor, llámame por mi nombre. Soy Douma y mi hija se llama _____.

- Está bien. Muchas gracias Douma, soy Kotoha y como ya te dije mi hijo se llama Inosuke. Pero creo que debería irme, no quiero que su esposa se moleste contigo por tener a una extraña en tu casa.

- En realidad no tengo esposa. Hace 9 meses me acosté con una chica porque estaba borracho al igual que ella, pero nunca me enteré que llegue a embarazarla. Ahora hace unas horas ella apareció en una cesta con una nota que decía que su madre no estaba lista para ser madre, que me la dejaría a mi y que renunciaba a tener alguna responsabilidad como su madre, entonces me puse a pensar en un nombre y me decidí por _____.

- Oh, lo lamento.

- No pasa nada, yo apenas recuerdo el rostro de esa chica, ni siquiera estaba enamorado de ella solo fue por el alcohol que hicimos...eso. Pero la verdad me alegra tener ahora una hija, aunque tenga que criarla solo. Tengo una idea, tu me dijiste que aparte de tu esposo no tienes a nadie pero es obvio que debes denunciarlo, así que Inosuke y tú pueden quedarse conmigo y mi hija, seguro le entretendrá mucho tener un hermanito, además será bueno cuando yo no pueda jugar con ella que tenga un compañero de juegos.

- ¿Encerio?.

- Claro.

- Wow, gracias Douma. Está bien, y cuando tú no puedas cuidar de ellos entonces yo los cuidare, puedo hacer las tareas del hogar mientras trabajas ya que no tengo experiencia en nada.

- ¿Osea una ama de casa?.

- Si.

- Está bien.