Capitulo 1

3.7K 278 88
                                    

***Dentro de la mente de Valentina

-¿Quieres ir a tomar algo esta noche?

Mi secretaria, la cual había comenzado a trabajar para mí hacía unos pocos días, comenzó a hiperventilar. Sentí como una sonrisa de suficiencia enmarcaba mi rostro, no pude evitarlo, hacerles sentir algo así a las mujeres era algo con lo que inevitablemente disfrutaba.

Era consciente de lo que era capaz de provocar en las mujeres y me sentía orgullosa. Hacía algunos años me juré no volver a sufrir por ninguna de ellas y ahora eran ellas las que caían gustosas en mis redes creyendo tal vez que podríamos llegar a algo más serio.

¿Amor? ¿Qué significaba esa palabra para mí?  Hacía bastantes años que no significaba nada, absolutamente nada.

-Supongo que eso es un sí... -susurré más cerca de su rostro, acariciando con mí aliento su rostro. El ascensor abrió sus puertas y me erguí. - Paso a buscarte a las once...

-Esto... Sí... ¿Sabes dónde vivo?... - salí del ascensor, sin hacerle caso.

Aunque con gusto le habría recordado que era yo la jefa de la empresa y podía disponer a mi antojo de las informaciones de mis trabajadores.

Me subí en mi automóvil, y dejé mi bolso sobre el asiento del copiloto, entonces sonó mi teléfono.

-Oh, no... -resoplé fastidiada, al saber de quien se trataba. - Andrea... creo que te lo había dejado claro.

-¿No podemos vernos esta noche?- preguntó ella.

Si había algo que me diese rabia era que las mujeres se pusieran pesadas. Y con Andrea cometí un error fatal. Era una de las modelos que habían pasado por la revista, y había consentido tener una especie de aventura con ella, nada serio, nada que ella no supiera, sin embargo no dejaba de molestarme y de presionarme siempre que podía.

-Imposible, tengo otros planes. - colgué.

Arranqué mi auto después de desabotonar un poco mi camisa, la verdad es que necesitaba descansar, aunque no sabía si podría descansar mucho ya que le había prometido a Sam salir a jugar un poco de fútbol con otras amigas. Suspiré, la idea me dejaba más cansada aún con el simple hecho de retenerla en mi cabeza.

Alguien se cruzó de repente al salir de las instalaciones de la empresa y frené bruscamente.

-¡¿En qué estabas pensando?! -grité asomando la cabeza por la ventanilla del auto.

-¡¿En qué estabas pensando tú?! ¡Si no te has dado cuenta no hay mucha visibilidad y por esa razón no tenías que haber venido a esa velocidad!- gritó la chica notablemente enfadada.

No podía negar que la chica era bastante guapa, su pelo negro caía sobre su espalda hasta la cintura, su cara era fina y sus ojos eran marrones, grandes y una mirada hermosa, muy sexy, sus curvas se marcaban bastante con esa falda negra, alta y aj...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

No podía negar que la chica era bastante guapa, su pelo negro caía sobre su espalda hasta la cintura, su cara era fina y sus ojos eran marrones, grandes y una mirada hermosa, muy sexy, sus curvas se marcaban bastante con esa falda negra, alta y ajustada que llevaba, y aunque no podía negar que me había hecho gracia su reacción, tenía que admitir que me había sacado de mis casillas. Ella se acercó hasta mi ventanilla.

Chantaje. Juliantina adapt. (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora